Sobre los kuwait¨ªes
Me complace comentar aqu¨ª algunos de los puntos expuestos por Jos¨¦ Francisco N¨²?ez Rosas (Lugo), en su carta del d¨ªa 19 de agosto.Punto 1. La cuna de la humanidad creo que nadie sabe d¨®nde est¨¢, ni tan siquiera si fueron cuna o cunas, vaya usted a saber. Me parece muy bien que los kuwait¨ªes desciendan de los utubi, yo de los Gonz¨¢lez, ?y usted?
Punto 2. Si en los siglos XVI y XVII Kuwait perteneci¨® a la provincia iraqu¨ª de Basora, tambi¨¦n por esas fechas, las provincias de la Cerda?a y el Rosell¨®n eran espa?olas, antes de pasar a manos de Francia, hasta la fecha, y no digamos de Gibraltar. Si empez¨¢semos a tirar de la manta de la historia, acabar¨ªamos por reconocer que nada en realidad nos pertenece, y que, unas veces conquistadores y otras conquistados, al final todos tenemos algo que no es nuestro y hemos perdido algo que nos han quitado.
Punto 12. ?Claro que votan s¨®lo los kuwait¨ªes! Cuando yo fui emigrante con mis padres, all¨¢ por los a?os cincuenta-sesenta, no ten¨ªamos derecho ni a voto ni a nada. S¨®lo ¨¦ramos jodios gallegos (t¨¦rmino despectivo que usaban los hijos de la madre patria para designar gen¨¦ricamente a los espa?oles) muertos de hambre, y m¨¢s nos val¨ªa callarnos, porque la violencia xen¨®foba no se limitaba a las palabras.
Puntos 14 y 15. En los a?os setenta tuve la oportunidad de visitar Kuwait, y me consta la magn¨ªfica obra de distribuci¨®n de la riqueza entre sus s¨²bditos realizada por el Gobierno. En Irak, Sadam s¨®lo ha repartido balas y gases, mandando a cientos de miles de hombres a la muerte sin el menor reparo. El curr¨ªculo de este se?or no consta m¨¢s que de una gran dosis de soberbia, egolatr¨ªa, megaloman¨ªa y otras patolog¨ªas que distinguen a los fan¨¢ticos capaces de arrastrar a las masas ignorantes y desinformadas a las m¨¢s horribles cat¨¢strofes en nombre de palabras vanas.-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.