R¨¦plica de Rafael Abitbol
En relaci¨®n al art¨ªculo que con fecha 26 de octubre publica su peri¨®dico en las p¨¢ginas de Televisi¨®n / Radio quisiera manifestar lo siguiente:1. Agradezco que su art¨ªculo intente contrastar versiones, pero lamento que arranque con un titular que asume como ciertas las acusaciones formuladas contra m¨ª por RNE, cuando ¨¦stas no han sido probadas. Dichas acusaciones son, de momento, tan s¨®lo la interpretaci¨®n parcial de RNE de mis comentarios y, en modo alguno, unos hechos demostrados como su art¨ªculo sugiere.
Bien es cierto, no obstante, que RNE se ha apoyado en esta interpretaci¨®n interesada, y no exenta de mala fe, para intentar justificar ante la opini¨®n p¨²blica lo que no es m¨¢s que un despido injusto e improcedente.
2. Su art¨ªculo reproduce datos enviados a su peri¨®dico y otros medios de comunicaci¨®n por RNE en un intento, por parte de este organismo, de utilizar la resonancia de la opini¨®n publicada para convertir en realidades lo que no son m¨¢s que mentiras.
Si el tiempo le hubiese permitido contrastar estos datos, resultar¨ªa ahora evidente para sus lectores que el d¨ªa 5 de octubre, fecha de la efem¨¦ride del 409 aniversario de Elektra, y ¨²nico d¨ªa del que deb¨ª respondera¨ªnte RNE seg¨²n el expediente que la empresa abri¨® contra m¨ª, se mencionaban en un contexto a todas luces informativo un total de 20 veces Elektra y un total de 16 veces Radio 3 (de RNE), y no, como reproduc¨ªa su art¨ªculo, 84 veces Elektra y ninguna RNE.
3. Rechazo categ¨®ricamente todas las acusaciones de RNE, que constituyen un grav¨ªsimo atentado contra mi honor personal y mi imagen profesional.
4. Contrariamente a lo que Pablo Garc¨ªa, director de Programas de RNE, declar¨® a su peri¨®dico, afirmo que:
a) Jam¨¢s en mi presencia se comunic¨® en la mesa de editores, antes del d¨ªa 5 de octubre, norma especial alguna que hubiese de modificar mi criterio informativo habitual o el de mis compa?eros.
b) Todos los editores de Radio 3 goz¨¢bamos desde el 1 de octubre de un 50% (frente al 100% tradicional hasta esa fecha) de libertad para programar m¨²sica y comentarios seg¨²n nuestro propio criterio; no ten¨ªamos, por tanto, obligaci¨®n de dar cuenta previa a nadie de nuestros prop¨®sitos.
5. Ser¨¢ la justicia espa?ola, en quien conf¨ªo plenamente, quien dictamine finalmente sobre todos estos hechos.- Rafael Abitbol.
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