De la uni¨®n total a las primeras disidencias
El Partido Socialista Obrero Espa?ol, en su composici¨®n actual, es en buena parte un partido de reflujo. Formado a partir de una escisi¨®n m¨²ltiple -la llopista y la llamada del interior-, acaba reunificando ftindacional mente a todas las ramas, corno primera medida. El PSOE hist¨®rico se rinde tras las primeras elecciones (1977) y el Partido Socialista Popular de Enrique Tierno Galv¨¢n lo hace, en 1978, al comprobar que s¨®lo le aguarda un dif¨ªcil futuro y, de hacer caso a las memorias de? viejo profesor, un sinrin de deudas. Y unificado el socialismo espa?ol -en toda Espa?a se han integrado las convergencias y federaciones socialistas, y en el caso espec¨ªfico de Catalu?a tambi¨¦n se ha logrado, tras la asimilaci¨®n del PSC Reagrupament despu¨¦s de la muerte de Josep Pallach, un ¨²nico partido-, se aborda la captaci¨®n de militantes de otras ¨¢reas de la izquierda y aun de? centro izquierda (es el caso de? PAD de Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, que proced¨ªa de UCI) y que se integra en el PSOE en 1982).El ¨²ltimo fichaje
El ¨²ltimo fichaje ha sido Curiel con -dice- 200 m¨¢s, aunque a ¨¦l y sus supuestos 200 compa?eros les llamaban en el PCE "los del taxi" porque, seg¨²n explica un miembro de la ejecutiva de? partido, "todos cab¨ªan en un taxi".
Paralelamente y a partir de 1988, se producen disensiones internas en el PSOE en varios frentes. Una, procedente de Izquierda Socialista, dar¨¢ con los huesos de Pablo Castellano y Francisco Bustelo en Izquierda Unida. Otra provoca la separaci¨®n de Ricardo Garc¨ªa Damborenea y el nacimiento de Democracia Socialista. La m¨¢s temida, sin embargo, es la que se produce por la v¨ªa de UGT y que culmina en la ruptura entre partido y sindicato o, seg¨²n explica un dirigente ugetista, "entre Nicol¨¢s y Felipe".
Es ¨¦sta una separaci¨®n dolorosa que se anuncia en 1985, cuando Redondo vota contra la ley de pensiones y pide el voto para el no en el refer¨¦ndum sobre la OTAN, y se ahonda definitivamente en 1988 hasta culminar, el 14 de diciembre de 1989, en la huelga general que encabezan los dos sindicatos mayoritarios.
Redondo dimitir¨ªa antes de su puesto en el Congreso, acompa?ado por Ant¨®n Sarac¨ªbar, e incluso se neg¨® a asist¨ªr al ¨²ltimo congreso de? PSOE, acusando al Gobierno de "conjurarse" con la patronal para aislar a UGT.
"La relaci¨®n entre el partido y UGT nunca ser¨¢ la misma", afirma un miembro de la ejecutiva ugetista, "pero no vamos a enga?arnos, buena parte de los cuadros sindicales son socialistas y cuando no est¨¦ Nicol¨¢s en la secretar¨ªa general las cosas tendr¨¢n que cambiar". A "Nicol¨¢s", le quedan a¨²n un par de a?os.
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