De Rusia a Israel
Los emigrantes jud¨ªos de la URSS hallan una patria, un fusil y una vida dura
J. J. AZN?REZ ENVIADO ESPECIAL Acabar de prostituta en Israel no era el prop¨®sito de Rina cuando abandon¨® la Uni¨®n Sovi¨¦tica en busca de su identidad perdida. Como hace 4.000 a?os Abraham emigr¨® a Cana¨¢n desde las tierras ba?adas por los r¨ªos Tigris y ?ufrates y 1.000 a?os despu¨¦s Mois¨¦s peregrin¨® con el pueblo jud¨ªo hacia la tierra prometida, un mill¨®n y medio de sus descendientes en la URSS, Rina entre ellos, confIuyen ahora en un suelo de promisi¨®n y sufrimiento. Israel, guerreando con los ¨¢rabes y en permanente trinchera, reagrupa a su di¨¢spora, a la que ofrece un fusil, una patria y una integraci¨®n dif¨ªcil.
El porvenir de Rina en un pa¨ªs, del que se dice naci¨® para no descansar y para no otorgar reposo a los dem¨¢s, es incierto. Y un a?o despu¨¦s de llegar a Ashdod, a 60 kil¨®metros de Jerusal¨¦n, se ofrece en sus calles por las mismas cosas que la deslumbraron en Kiev: unos pantalones vaqueros de dise?o, unos zapatos de marca, una camiseta de capricho. La situaci¨®n de Rina, aunque claramente marginal, refleja de alguna manera el reverso de un fen¨®meno migratorio que plantea al Gobierno israel¨ª importantes problemas de absorci¨®n. En una naci¨®n de cinco millones de habitantes, tan deseosa de crecimiento demogr¨¢fico como de un desarrollo econ¨®mico que posibilite un mercado de trabajo atractivo, el arribo masivo de jud¨ªos pobres obliga a esfuerzos considerables y una atenci¨®n millonaria.
Entre 1989 y octubre de este a?o, las solicitudes de visado para entrar en Israel desde la URSS se dispararon y fueron procesadas cerca del mill¨®n y medio de solicitudes. En sinton¨ªa con esta avalancha, el semanario Novosti Nideli en ruso pas¨® en convertirse en diario. Desde 1971 hasta diciembre de 1989 llegaron al aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv y a otras terminales israel¨ªes un total de 159.382 jud¨ªos, en su mayor parte sin hablar hebreo.
La direcci¨®n palestina acusa al Gobierno de promover el arrinconamiento ¨¢rabe en Jerusal¨¦n y en Gaza y Cirjordania con asentamientos de inmigrantes. El Ministerio de Absorci¨®n asegura que quienes optaron por asentarse en los territorios ocupados no llegan al 0,34% del total.
El regreso de parte de un exilio perdido por los siglos de los siglos en los cuatro puntos cardinales de la URSS, Estados Unidos, Canad¨¢ o ?frica prosigue. En junio la aguncia estatal que ordena su entrada y el Gobierno de Isaac Shamir aprobaron un presupuesto de 2.300 millones de d¨®lares, ¨²nicamente para integrar cada a?o a 150.000 personas de origen jud¨ªo venidas de las Rep¨²blicas sovi¨¦ticas. Con este presupuesto se sufragan subsidios y primeros gastos, viajes, cursillos profesionales, escuelas de capacitaci¨®n y fundamentalmente una aceleraci¨®n de los proyectos de construcci¨®n de viviendas.
Cualificaci¨®n profesional
El problema econ¨®mico y la adaptaci¨®n a una realidad nueva ha creado tambi¨¦n muchas frustraciones. Una familia de tres personas recibe al llegar aproximadamente 8.500 d¨®lares en met¨¢lico, pero la cesta de la compra de una familia de cuatro miembros exige mensualmente m¨¢s de 1.000 d¨®lares. No pocos de los nuevos de los nuevos ciudadanos israel¨ªes gozan de una cualificaci¨®n profesional aprovechable. Pero en Israel tambi¨¦n hay que barrer las calles y recoger la basura. Hasta el acuchillamiento de octubre y el cruento enfrentamiento entre jud¨ªos y palestinos, cerca de 150.000 ¨¢rabes de Gaza y Cisjordania hac¨ªan esos trabajos. Las intenciones del Gobierno son sustituir esa mano de obra por jud¨ªos sovi¨¦ticos, pero el ¨¦xito ha sido relativo.
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