Un penalti a Schuster dio el triunfo al Atl¨¦tico
El Atl¨¦tico de Madrid gan¨® en C¨¢diz, aunque sin cumplir ninguno de los objetivos anuncia dos por su t¨¦cnico y su presidente. Ivic dijo en la v¨ªspera que era mejor anteponer el buen f¨²tbol y pensar luego en el resultado, mientras que Gil pens¨® en una nueva goleada como la obtenida frente al Zaragoza.El Atl¨¦tico hizo un mal partido en el Carranza, gan¨® por la m¨ªrilma y de penalti, y dej¨® tras de s¨ª el mismo sentimiento de persecuci¨®n arbitral que Gil divulga a los cuatro vientos. Sin embargo, los dos valiosos puntos conseguidos permiten al bloque de Tomislav lvic mantenerse en el grupo de cabeza de la clasificaci¨®n de la Liga, suficiente para garantizar una semana de calma en el alterado club rojiblanco.
El partido se jug¨® en su primera parte con el Atl¨¦tico adelantado sobre la l¨ªnea media del C¨¢diz, que intentaba, agazapado, sorprender con juego de contrataque. Ivic cumpli¨® lo prometido al situar su equipo en una te¨®rica posici¨®n ofensiva, sabedor de que en el Carranza se podr¨ªa estar dilucidando su destituci¨®n, sobre todo porque de all¨ª tan s¨®lo ha salido derrotado el Oviedo en lo que va de Liga.
Pero la intenci¨®n ofensiva del t¨¦cnico se qued¨® en eso, en pura intenci¨®n. El C¨¢diz dispuso de las mejores ocasiones en el primer periodo, sobre todo una en la que Abel evit¨® con una gran parada que el tiro de Bernardo se conviertiese en gol, y acab¨® acorralando al Atl¨¦tico de Madrid en su parcela tras el gol de Rodax.
El panorama se mantuvo igual durante todo el partido, pero adem¨¢s de los errores de los futbolistas, en la segunda mitad se sumaron los del colegiado Calvo C¨®rdova, sustituto de P¨¦rez Cabezas, quien renunci¨® a su designaci¨®n para arbitrar.
Calvo C¨®rdova acert¨® en la jugada del penalti de Cortijo a Schuster, que sirvi¨® para que el austriaco Rodax hiciese su ¨²nica jugada en el terreno de juego y materializase el triunfo. Pero luego el colegiado se equivoc¨® en dos jugadas decisivas, en las que perjudic¨® al C¨¢diz.
La primera cuando se inhibi¨® de pitar en una jugada protagonizada por Jos¨¦ y el cancerbero Abel, en la que el portero atl¨¦tico agarr¨® visiblemente la camiseta del delantero cadista. La segunda cuando a 10 minutos del final se?al¨® un fuera de juego m¨¢s que dudoso de nuevo de Jos¨¦, quien encar¨® el marco y bati¨® la meta madrile?a.
A partir de ese momento el partido se disput¨® bajo una fuerte bronca del escaso p¨²blico asistente al Carranza. El C¨¢diz intent¨® llegar hasta Abel a fuerza de balonazos, pero en esa forma de jugar el Atl¨¦tico se mostr¨® ayer superior, y su defensa repeli¨® con mucha m¨¢s consistencia y lejan¨ªa los balones bombeados que hasta ella llegaban.
A pesar de la incorporaci¨®n de Romo, que intent¨® suplir a Indio V¨¢zquez en el papel de organizador, el C¨¢diz se mostr¨® escaso de recursos y destinado a sufrir, como cada a?o, lo que queda de temporada por eludir el descenso.
La imagen de Gil por tierras gaditanas se enturbi¨® tras la primera jugada y fue vilipendiada tras la segunda. El tan carism¨¢tico como discutido presidente hab¨ªa recorrido la provincia de C¨¢diz para inaugurar pe?as de Futre y proclamar en el sur su cuarto proyecto futbol¨ªstico. Sin embargo, su presencia en el palco del Ram¨®n de Carranza quem¨® todo su empe?o.
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