A m¨¢s de mil kil¨®metros

El almirante jefe de la Flota, Pedro Regalado, les augur¨®, cuando partieron de Rota el 31 de octubre, unas navidades "largas y dif¨ªciles". El pron¨®stico se ha cumplido. Tres semanas antes de Nochebuena, la tripulaci¨®n de la fragata Numancia se enteraba, tras los toques de la sirena de alarma, de que uno de los suyos, el cabo prirriero Ignacio Romero, de 22 a?os, se hab¨ªa convertido en el primer espa?ol muerto en el conflicto del Golfo. Nueve fechas despu¨¦s del d¨ªa de Reyes finaliza el plazo que la ONU ha concedido a Irak para que abandone Kuwait ante la amenaza del uso de.la fuerza. Ciertamente, no est¨¢ resultando una traves¨ªa f¨¢cil.

La delegaci¨®n de parlamentarios espa?oles encabezada por el presidente del Senado, Juan Jos¨¦ Laborda, que visit¨® el pasado fin de semana a la fragata espa?ola, anclada en el puerto de Abu Dhabi (Emiratos ?rabes Unidos), se encontr¨® un barco remozado para la ocasi¨®n y una tripulaci¨®n que trataba de recuperar su ritmo normal de actividad, alterado por el accidente del cabo pirimero. Un ritmo de vida en el que se est¨¢ s¨®lo pendiente de los turnos de guardia -seis horas de guardia y seis horas de descanso- y con la vista puesta en la vuelta a Espa?a."Que se acabe esto pronto y que nos manden para all¨¢", es la frase que m¨¢s repiten los marineros de la Numancia. Mientras, quedan las escalas cn puerto para avituallamiento. La del pasado fin de semana en Abu Dhabi., marcada por los actos para recibir a la delegaci¨®n y a¨²n muy reciente el accidente del militar espa?ol, tuvo un car¨¢cter especial. Con todo, como siempre que se toca puerto y no se est¨¢ de servicio, las compras durante el d¨ªa y las cervezas por la noche marcaron la jornada.

La fragata Numancia, como antes la Santa Mar¨ªa, se ha convertido en el barco de la Armada espa?ola con m¨¢s c¨¢maras de video y equipos de alta fidelidad por metro cuadrado. La electr¨®nica, a bajo precio, y la ropa de marca se llevan casi todos los d¨®lares que la Armada entrega a los marineros al llegar a puerto. El resto se va en copas e incluso se puede ahorrar un poco.

"?Bienvenidos!"

No es todav¨ªa medianoche en la discoteca del hotel Centre, una de las tres de la capital de los Emiratos, cuando el pinchadiscos grita a trav¨¦s del micr¨®fono en un espa?ol s¨®lo comprensible con muy buena voluntad: "?Bienvenidos marineros espa?oles!...". El grito es respondido con alegr¨ªa desde algunas mesas, y empieza a sonar Bamboleo. La pista se anima con la presencia de marineros y tanto es el ¨¦xito que el pinchadiscos insiste con La Bamba."Yo lo ¨²nico que quiero es que esto se acabe y estar ya en mi casa", comenta uno de los bailarines que regresa a la mesa tras haber repostado en la barra.

-"?Y eso de pasar las,navidades fuera de casa?"

-"Esto es la mili, no hay m¨¢s remedio que aguantarse".

Entre la tripulaci¨®n de la Numancia la sensaci¨®n de peligro no ha cobrado especial relevancia. Algunos marineros confesaron que est¨¢n m¨¢s preocupados por las noticias que puedan recibir sus familias en Espa?a que por su propia seguridad.

El 15 de enero, fin del ultim¨¢tum previsto en la resoluci¨®n de la ONU, la tienen m¨¢s presente como referencia para un posible relevo -se cumple un tiempo similar al que la fragata Santa Mar¨ªa estuvo en el Golfo- que como una fecha en que puede estallar la guerra.

Las noticias que les llegan a trav¨¦s de un resumen diario de prensa y de Radio Exterior no parecen suponer mayores preocupaciones. Como muestra, un bot¨®n: cuando este peri¨®dico le pregunt¨® a un tripulante de la Numancia por las informaciones que recib¨ªan de Espa?a, el joven contest¨®: "Yo ya no quiero ni escuchar la radii". "?Por las noticias de la crisis?". "No, por los disgustos que me dan los domingos cuando pierde el Betis", respondi¨® el marinero.

[La delegaci¨®n parlamentaria espa?ola visit¨® ayer en el puerto egipcio de Hurghada a las dotaciones de las corbetas Diana e Infanta Cristina. El presideme del Senado declar¨® durante la visita que las familias de los marineros espa?oles destacados en el Golfo "pueden estar tranquilas, ya que las tripulaciones no corren ning¨²n riesgo", informa Efe].