?Organizaci¨®n medieval?
El constante baile de fechas de las reuniones comuni arias, la alegr¨ªa a la hora de presentar y retirar propuestas y la improvisaci¨®n en la preparaci¨®n de consejos de ministros suscitaron desde el principio virulentas cr¨ªticas contra la presidencia italiana. "Es imposible saber lo que pretenden estos se?ores", comentaba ya en julio un ministro espa?ol.Tres meses despues el semanario brit¨¢nico The Economist comparaba la gest¨ªon italiana con un autob¨²s conducido por los hermanos Marx. El pasado viernes el ministroportavoz alem¨¢n, Hans Klein, hablaba de la "organizaci¨®n medieval" de la cumbre romana tras el derrumbe en el centro de prensa de la galer¨ªa Colonna de una pared m¨®vil ante la que se agolpaban un mont¨®n de per¨ªodistas.
"Es dif¨ªcil calificarla de medieval", contest¨® divertido el presidente Felipe Gonz¨¢lez,
aqu¨ª hay por todas partes ruinas romanas". "En esta ciudad lo medieval es casi futurible". "A cada uno se le juzga por los resultados y los de esta presidencia a la vista est¨¢n", concluy¨®.
El presidente de la Com¨ªsi¨®n Europea, Jacques Delors, tampoco escatim¨® alabanzas en su valoracion de los avances del semestre y hasta el propio Hans Klein dio marcha atr¨¢s y dijo que todas las cumbres son "medievales" porque los res¨²menes de las intervenciones de los l¨ªderes est¨¢n escritos a mano en una letra ilegible.
Roma les gust¨® a todos. El presidente Fran?ois Mitterrand mand¨® a paseo su coche blindado y regres¨® el viernes por la noche al palacio del Quirinal en una calesa tirada por caballos. Y hasta compr¨® casta?as.
El canciller alem¨¢n, Helmut Kohl, prefiri¨®, por su parte, recorrer a pie, ayer por la ma?ana, la c¨¦lebre V¨ªa Condotti, par¨¢ndose ante escaparates de firmas prestigiosas como Gucci y Fendi. A la salida de la cena de ayer en el palacio Chigi, John Major, decidi¨® desaparecer durante un rato.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.