Toshack dirige desde un despacho las principales decisiones de la Real Sociedad

La Real Sociedad vive una situaci¨®n muy confusa a pesar de contar con el mayor presupuesto de su historia. Tras el despido de Boronat, directivos del club reconocen que las principales decisiones deportivas las adopta John Benjamin Toshack desde su nuevo despacho en Zubieta, una antigua pista de squash, a pesar de que no puede ejercer hasta el 1 de julio por haber dirigido al Madrid este a?o. El t¨¦cnico oficial es Exp¨®sito, un hombre de la casa que nunca subi¨® de Segunda B. La Real cuenta tambi¨¦n con dos segundos, el de Boronat (Iriarte) y el que se ha tra¨ªdo Exp¨®sito (Amas).

El pasado mes de enero, el presidente realista I?aki Alkiza decidi¨® la destituci¨®n de su t¨¦cnico Marco Antonio Boronat por la mala imagen ofrecida por el equipo frente al Sevilla en Atocha. Sin embargo, Alkiza no hab¨ªa asistido al encuentro, que en opini¨®n de los cronistas permiti¨®, a pesar del empate, albergar esperanzas sobre la recuperaci¨®n deportiva del conjunto blanquiazul. Incluso a Boronat, que esper¨® el cese al t¨¦rmino de la pasada temporada o tras las derrotas frente a Osasuna o Athletic, le sorprendi¨® en ese momento su destituci¨®n.Desde entonces, la situaci¨®n de la Real Sociedad revela un estado de confusi¨®n que raya en ocasiones con lo anecd¨®tico. Con Boronat despedido y Toshack imposibilitado para sentarse en el banquillo por su finiquito con el Real Madrid, la directiva opt¨® por Javier Exp¨®sito para la direcci¨®n del equipo propiciando el desconcierto del joven Atkinson que no entend¨ªa c¨®mo aquel hombre a quien ¨¦l solicitaba camisetas y otros materiales era de la noche a la ma?ana su nuevo t¨¦cnico.Javier Exp¨®s¨ªto ha desempe?ado durante 25 a?os labores relacionadas con el f¨²tbol base sin sobrepasar jam¨¢s la Segunda Divisi¨®n B del. f¨²tbol espa?ol. Al propio tiempo, ha sido el encargado de las instalaciones de Zubieta, faceta esta ¨²ltima en la que Atkinson fundamentaba su relaci¨®n con ¨¦l Ajeno a organigramas y a la historia del club, el prestigioso jugador brit¨¢nico no daba cr¨¦dito a la nueva modalidad sucesoria en el banquillo.Exp¨®sito cuenta desde entonces con Carmelo Amas como segundo entrenador, mientras en el panel de t¨¦cnicos subsiste Salva Iriarte quien ejerc¨ªa id¨¦nticas funciones con Boronat.

Esta amalgama de t¨¦cnicos tiene un denominador com¨²n, John Benjamin Toshack, quien oficialmente no ejercer¨¢ como manager aut¨¦ntico del club hasta el pr¨®ximo 1 de julio, seg¨²n exige la legislaci¨®n vigente. Tanto el presidente Alkiza corno el t¨¦cnico Exp¨®sito han reconocido, sin embargo, el liderazgo moral que ejerce el gal¨¦s y las charlas habituales que mantiene con unos y otros en la actual situaci¨®n del equipo.

No obstante, el influjo de Toshack va m¨¢s lejos y tras las decisiones de Exp¨®sito se adivina la mano del gal¨¦s. Con despacho reservado en Zubieta (una antigua pista de squash), Toshack pretende reorganizar el futuro inmediato del club, aunque las preocupantes circunstancias actuales le hayan forzado a apresurar su trabajo de asesor. El brit¨¢nico Richardson ha sido el primer pagano de la situaci¨®n al no ser si quiera convocado para el partido de Copa frente al Sporting. Tras conocer la noticia, el ex jugador del Arsenal manifestaba su sorpresa sobre el origen de la decisi¨®n "en un club donde hay varios managers".A Toshack, uno de los impulsores de la apertura de fronteras, nunca le gustaron los fichajes de la Real Sociedad. De Aldridge critic¨® su alto precio para su elevada edad; dijo desconocer a Atkinson cuando fuentes autorizadas de las islas afirmaban lo contrario y de Richardson asegur¨® que ocupaba una plaza que la Real Sociedad ya ten¨ªa bien cubierta con Larra?aga. Ahora, y especialmente a partir del 1 de julio, cuando previsiblemente se convertir¨¢ en el nuevo t¨¦cnico de la Real Sociedad, tendr¨¢ que afrontar una situaci¨®n dificil que ¨¦l mismo propici¨® con su veloz salida de la Real Sociedad. La tarea de Benjam¨ªn Toshack, ¨ªmpuesto durante cinco a?os por la actual junta directiva a la pr¨®xima sociedad an¨®nima que se haga cargo del club, se antoja complicada. Encargado de gestionar su propia herencia, debe solventar primero las urgencias actuales del club que ha depositado en ¨¦l toda su confianza.

La baja forma de Aldridge, poco aclimatado a la ciudad, y el bajo rendimiento de Atkinson y Richardson podr¨ªan favorecer un r¨¢pido cambio de aires.