Bush y Mitterrand difieren sobre la cuesti¨®n palestina

La cumbre celebrada ayer en La Martinica francesa entre los presidentes de EE UU y Francia, George Bush y Fran?ois Mitterrand, respectivamente, ha puesto de relieve dos cosas: una luna de miel sin precedentes entre Par¨ªs y Washington desde el final de la Segunda Guerra Mundial y, al mismo tiempo, la existencia de enfoques completamente diferentes para abordar la soluci¨®n del conflicto ¨¢rabe-israel¨ª, en particular el contencioso palestino tras la victoria militar aliada en la guerra del Golfo.

Tras una estancia de un d¨ªa en Ottawa, Bush se traslad¨® ayer a La Martinica en la segunda etapa de un viaje de cinco d¨ªas destinado a discutir la situaci¨®n del Oriente Medio con sus aliados occidentales -Canad¨¢, Francia y Gran Breta?a- tras la derrota militar de Irak. El presidente norteamericano tiene previsto reunirse ma?ana en Bermuda con el primer ministro brit¨¢nico, John Major.Una plantaci¨®n de ca?a de az¨²car, dedicada a la producci¨®n de ron, en la id¨ªlica posesi¨®n francesa en el Caribe fue el marco escogido por los dos presidentes para sus conversaciones sobre Oriente Pr¨®ximo.Bush, que quiso reunirse con Mitterrand en territorio franc¨¦s como tributo a la contribuci¨®n de Francia en la guerra del Golfo, aterriz¨® en la isla en su flamante Air Force One. Por su parte, Mitterrand lleg¨® de Par¨ªs dos horas antes en un vuelo especial de Concorde.

Las conversaciones, seg¨²n declaraciones en rueda de prensa conjunta de los primeros mandatarios fueron "extraordinariamente productivas". Sin embargo, ninguno de los dos revel¨® en qu¨¦ basaban su afirmaci¨®n relativa a esa "productividad".

Lo que s¨ª qued¨® claro, aparte de las declaraciones de felicitaci¨®n mutuas expresadas, es que las posiciones de ambas potencias con relaci¨®n al problema palestino, si no divergentes, s¨ª est¨¢n todav¨ªa lo bastante separadas como para impedir una pol¨ªtica conjunta.

Mitterrand quiere la convocatoria de una conferencia de los miembros del Consejo de Seguridad para tratar la cuesti¨®n palestina. Bush, sin excluir la celebraci¨®n de esa conferencia en el futuro, es sin embargo partididario de que la misma sea la culminaci¨®n de un proceso y no su g¨¦nesis.

"EE UU se ha pronunciado una y otra vez sobre la celebraci¨®n de una conferencia internacional y ha manifestado que podr¨ªa ser ¨²til en el momento oportuno", dijo Bush, que en los momentos actuales se decanta m¨¢s por una reuni¨®n bilateral entre Israel y los palestinos paralela a una negociaci¨®n entre el Estado jud¨ªo y los pa¨ªses ¨¢rabes para poner fin al estado de guerra vigente desde la partici¨®n de Palestina en 1948.

Igualmente, los dos presidentes mantienen posiciones divergentes en los puntos relativos a la representaci¨®n y al establecimiento de un Estado palestinos. Mitterrand cree que la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP) y su l¨ªder, Yasir Arafat, contin¨²an gozando de la absoluta confianza de los palestinos de los territorios ocupados. Por su parte, Bush, sin excluir un futuro papel para Arafat y la OLP, no ocult¨® su irritaci¨®n por la posici¨®n de apoyo total a Irak mantenida por Arafat durante la guerra del Golfo. "Apost¨® por el caballo err¨®neo", dijo Bush, para a?adir a continuaci¨®n que, por el momento, EE UU se niega a reanudar el di¨¢logo con la OLP.

Los helic¨®pteros de Sadam

En una conferencia de prensa conjunta con Mulroney al final de su estancia en Canad¨¢ el mi¨¦rcoles, Bush expres¨® por primera vez en p¨²blico su preocupaci¨®n por la situaci¨®n interna en Irak y acus¨® a Sadam Husein de estar violando el acuerdo de alto del fuego alcanzado por el comandante supremo de la Operaci¨®n Tormenta del Desierto, general Norman Schwarzkopf, en su reuni¨®n con los militares iraqu¨ªes el pasado d¨ªa 3."Debo confesar nuestra preocupaci¨®n por el uso de helic¨®pteros por parte de Irak en violaci¨®n del acuerdo [de alto el fuego]. Esta cuesti¨®n debe ser resuelta antes de que el actual cese de hostilidades provisional se convierta en permanente", declar¨® Bush. Expres¨® tambi¨¦n su preocupaci¨®n por la posibilidad de que se creara "un vac¨ªo de poder" en Irak.