El presidente insin¨²a a sus ministros que cuiden las relaciones con el grupo parlamentario
El ministro Carlos Solchaga y el portavoz socialista Eduardo Mart¨ªn Toval se vieron ayer las caras por vez primera desde que ¨¦ste declarara el lunes que el titular de Econom¨ªa no tiene nada que hacer en el partido. Ayer, ninguno de ellos mud¨® el gesto ni hizo aspaviento alguno. Solchaga ejecut¨® su tradicional rito de ajustarse los pantalones para tomar asiento y se mostr¨® tan tranquilo. En los pasillos, fuentes socialistas se?alaron que el presidente ha trasladado a sus ministros el mensaje de que deben cuidar su relaci¨®n con el grupo parlamentario y hacerle part¨ªcipe de sus decisiones.
Mart¨ªn Toval, quiz¨¢ para salir al paso de sus recientes manifestaciones, hizo ayer una defensa a ultranza de este Gobierno, que contar¨¢, dijo, "con 1 apoyo pleno del grupo parlamentario, porque es un Gobierno socialista, presidido por el secretario general del PSOE y que aplicar¨¢ el programa del partido socialista". Mart¨ªn Toval, no obstante, precis¨® que este Ejecutivo no gobierna "para el PSOE sino para toda Espa?a".El problema de las relaciones entre los parlamentarios y el Gobierno acapar¨® el pasilleo previo al debate sobre el estado de la naci¨®n. Y esta vez el vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, y el propio Carlos Solchaga coinc¨ªdieron: ninguno pronunci¨® palabra.
S¨ª habl¨®, en cambio, el ex ministro Jos¨¦ Barrionuevo: -Desconozco que existan disensiones. He visto y he o¨ªdo, como todos, algunas manifestaciones, pero me parece que ser¨ªa excesivo calificarlas de disensiones. Lo que pasa es que cada uno puede manifestar sus criterios y cada uno tiene su forma de expresarse".
Juan Manuel Eguiagaray se enfrent¨® ayer a su primera avalancha de micr¨®fonos como nuevo ministro. En sus declaraciones admiti¨® impl¨ªcitamente la existencia de problemas, puesto que habl¨® de la necesidad de hacer un esfuerzo (y no hay esfuerzo si no hay problema). "A la cabeza del Gobierno", dijo Eguiagaray, "est¨¢ el presidente, que es el secretario general del partido; y la mayor parte de los miembros del Gobierno son adem¨¢s militantes del partido socialista, y algunos incluso formamos parte de su direcci¨®n. Por tanto, vamos a ,hacer todos el esfuerzo, que es por otro lado lo que exige la l¨®gica de la situaci¨®n pol¨ªtica y lo que exige tambi¨¦n la coherencia del partido socialista, para que las relaciones sean lo m¨¢s fluidas posible, entre el Gobierno, que tiene que gobernar para el conjunto de los ciudadanos, y el partido socialista, que tiene que seguir representando y expresando lo que son los puntos de vista espec¨ªficos del partido socialista".
Jos¨¦ Mar¨ªa Benegas, secretario de organizaci¨®n del PSOE, coment¨® por su parte que el partido siempre ha apoyado al Gobierno socialista, y agreg¨®: "No veo ninguna raz¨®n para que esto no siga siendo as¨ª. El partido va a apoyar a su Gobierno; no creo que se pueda hablar de tensiones".
Los ministros reci¨¦n despedidos ocuparon los esca?os de la parte alta del hemiciclo, y la concurrencia estuvo pendiente de la cara de Enrique M¨²gica, a quien se supone el m¨¢s disgustado. Pero no dio juego.
La primera foto
El gent¨ªo fotogr¨¢fico se centr¨® en el encuentro entre Gonz¨¢lez y el vicepresidente Serra, para tomar la primera foto de ambos, desde el ascenso del ex ministro de Defensa, y tanto se concentr¨® que la aglomeraci¨®n imped¨ªa el paso hacia su esca?o al mism¨ªsimo Alfonso Guerra, quien, apeado ya del oropel, hubo de dar un rodeo sin que le siguieran teleobjetivos.
La sesi¨®n matinal concluy¨® pasada la una de la tarde con una salva de aplausos socialistas de 20 segundos de duraci¨®n para el presidente del Gobierno, y a continuaci¨®n las c¨¢maras y los bol¨ªgrafos se aprestaron a atender, ya al aire libre, la contrarr¨¦plica de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, el presidente del PP. Pero Aznar call¨®. Dejaba as¨ª a Felipe Gonz¨¢lez como acaparador de la millonaria audiencia de los telediarios del mediod¨ªa, mientras que ¨¦l sustra¨ªa su imagen a los minuciosos minutados de apariciones televisivas que tanto se manejan luego en la precampa?a electoral.
Felipe Gonz¨¢lez almorz¨® en el Congreso con el vicepresidente Serra y el ministro Solchaga. Todos resolvieron su apetito a base de emparedados de jam¨®n y queso. El presidente pidi¨® un filete con ensalada.
Las informaciones sobre el debate del estado de la naci¨®n han sido realizadas por Anabel Diez, Juan G. Ib¨¢?ez, ?lex Grijelmo y Charo Nogueira.
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