Los polacos podr¨¢n entrar en Alemania sin visado a partir del pr¨®ximo lunes
A partir de las cero horas del lunes los polacos podr¨¢n entrar en Alemania sin necesidad (le visado. El Gobierno de Borin hab¨ªa consegu¨ªdo aplazar esta inedida, prometida a principios de nov¨ªembre por el canciller Helmut Koh1 al entonces primer ministro polaco, Tadeusz Mazoweck" durante la reuni¨®n que mantuvieron ambos mandatarios en la localidad fronteriza de Francfort del Oder.Desde el pasado 3 de octubre, fecha de la unificaci¨®n alemana, el flujo de polacos hacia Occidente, que se contaba en centenares de miles, se cort¨® radical mente. Dadas las act'v?dades de contrabando y mercado negro a que se dedicaban, constitu¨ªa una situaci¨®n embarazosa para Bonn, pero su vuelta anuncia mayores problemas para. las ya de por s¨ª abrumadas autoridades de los nuevos cinco I?nder federales. Desde hace unos d¨ªas abundan los rumores sobre las actividades de grupos racistas y neonazis, supuestamente dis puestos a organizar un comit¨¦ de recepci¨®n de tonos violentos.
Donde parece m¨¢s probable que se produzcan aut¨¦nt¨ªcos problemas es en la localidad fronterisa de Gerlitz, en Sajonia. Se trata de una ciudad de 50.000 habitantes, una parte de la cual est¨¢ en territorio polaco, y por donde, seg¨²n estos rumores, m¨¢s de 20.000 gitanos sinti, de origen rumano o polaco, ya qLIC en la mayor¨ªa de los casos no se sabe muy bien su nacional 1 dad, est¨¢n preparados para entrar en Alemania. Grupos de autodefensa parecen haber surgido en esta zona y, armados con palos, estar¨ªan preparados para impedir la entrada de extranjeros. En Berl¨ªn, su alcalde, el democristiano Eberhart Diepgen, ya ha hecho saber que se prepara para recibir a m¨¢s de 100.000 polacos cada fin de semana.
Kohl, en la RDA
Esta decisi¨®n coincide con el anuncio de la visita que realizar¨¢ ma?ana Kohl a la desaparecida RDA, la primera desde el pasado noviembre, cuando durante la campana electoral todav¨ªa se presentaba como el hombre providencia] que tra¨ªa corisigo la abundancia y el blenestar. El canciller, que visitar¨¢ la ciudad de Erfurt, capital del Estado federal de Tur¨ªngla, est¨¢ siendo objeto ¨²ltimamente de duras cr¨ªticas, dado el deterioro (le la situacl ¨®n econ¨®m lea y social. Seg¨²n Dieter Vogel, el portavoz del Gobierno, el canciller "no tiene miedo a un ba?o de multitudes".Kohl se juega una gran parte de su futuro pol¨ªtico dentro de dos semanas en las eleccIones de Renania-Palatinado, sil tierra natal y un feudo eterno de la CDU, y podr¨ªa recibir el domingo en Erfurt m¨¢s de un tomatazo, si se cumplen las amenazas de los crispados ciudadarlos de las zonas industriales de Jeria, Weimar y el llamado anillo saj¨®n, el cintur¨®n industrial de la ex RDA ahora en derribo.
La ca¨ªda en desgracia del canciller no har¨ªa m¨¢s que beneficiar a la extrema derecha, dis" uesta a recuperar el terreno perdido en detrimento del partido de Kohl.
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