El encajador vuelve al 'ring'
Aprendi¨® en Londres a bailar con la m¨¢s fea trabajando de taxi-boy en el Club Mediterran¨¦e, cuando se retrasaba la beca espa?ola para la London School Economic. Su apostura engendraba a veces un temblor indeciso en la armoniosa resignaci¨®n sensual de las maduritas inglesas, pero ¨¦l no era un latin lover propiamente dicho sino, m¨¢s bien, un seductor baturro nacido hace 58 a?os en Alca?iz: Jos¨¦ Ram¨®n Lasu¨¦n, candidato por el CDS a la alcald¨ªa madrile?a.Hu¨¦rfano a los 17 a?os de un padre liberal, encarcelado en la guerra civil por los republicanos y desterrado despu¨¦s por los falangistas a Badajoz, Lasu¨¦n se hizo un estupendo economista a base de codos y becas. Ello no le imped¨ªa, sin embargo, participar activamente en las primeras tentativas democr¨¢ticas de los colegios mayores, y lleg¨® a ser, por elecci¨®n, director del Men¨¦ndez y Pelayo. M¨¢s tarde, catedr¨¢tico ya, fue nombrado por Villar Palas¨ª, decano de la Facultad de Econ¨®micas de la Universidad Aut¨®noma de Madrid, reci¨¦n fundada, y los alumnos le concedieron el entonces glorioso t¨ªtulo de decano rojo.
En la Facultad de Barcelona, de la que tambi¨¦n fue catedr¨¢tico, coincidi¨® con Narc¨ªs Serra y Ernest Lluch, entre otros, y en los Estados Unidos, donde cosech¨® varios masters, mantuvo es trechos contactos con el equipo de Robert Kennedy, uno de los pol¨ªticos m¨¢s admirados por ¨¦l junto a Winston Churchill, y por razones de afinidad nacionalista, Fernando el Cat¨®lico quien se vio tambi¨¦n obligado muchas veces a bailar con la m¨¢s fea, c¨®nyuge incluida.
Desde los 18 a?os, y a pesar de obligadas ausencias, se considera vecino de Madrid y altamente capacitado para ocupar su alcald¨ªa, ya que es un experto en problemas de urbanismo y vivienda, como demostrar¨ªa su colaboraci¨®n en el primer Plan Nacional de la Vivienda y, m¨¢s tarde, sus estudios sobre la viabilidad econ¨®mica de Azca.
Siempre en su sitio
Contrasta en Lasu¨¦n de un modo muy llamativo la precisi¨®n de sus conocimientos con la aparente ambig¨¹edad de su ideolog¨ªa, a la que podr¨ªa calificarse tal vez err¨®neamente de cunera. Sin embargo, este hombre defiende la rectitud permanente de un discurso inamovible. como si por mucho que chiflen, chiflen, fueran las circunstancias las que acaban sali¨¦ndose de la v¨ªa, y no ¨¦l, baturro siempre en su sitio. Un sitio extra?o. En los albores de la transici¨®n, y ante una competencia entre las muchas siglas socialdem¨®cratas, Lasu¨¦n dudo entre incrustar a su partido, Federaci¨®n Socialdem¨®crata, en las filas del PSOE o fortalecerlo ali¨¢ndose con un cierto progresismo falangista y los restos ya desguazados del llamado PSOE hist¨®rico. Termin¨® obviamente en los brazos de Su¨¢rez como diputado de UCD por Teruel. Luego se hizo diputado de Coalici¨®n Popular por Barcelona, 1982, y por Zaragoza, 1986, pero no quiso bailar con Hern¨¢ndez Mancha y se larg¨® al Grupo Mixto. Tras dos a?os de descanso, volvi¨® a la pol¨ªtica atra¨ªdo por Su¨¢rez, y ahora es diputado del CDS por Murcia.
Tal vez se deba esta movilidad pol¨ªtica al magn¨ªfico juego de piernas que aprendi¨® boxeando, siempre en el campo amateur, y al desprecio a los golpes recibidos y por recibir que "no duelen, pero cansan". Golpes ya le han dado, desde Fuentes Quintana en UCD hasta Hern¨¢ndez Mancha en CP, pero ¨¦l es un encajador / fajador que admira el arte de la esquiva de Ray Sugar Robinson pero se resigna, al cuerpo a cuerpo como Rocky Marciano. Aunque ahora juega al golf y vive en un chal¨¦ muy cerca de Madrid, en su rostro y en sus gestos, ampulosos a veces, y sobre todo en su mirada, dirigida en algunos momentos hacia una lejan¨ªa invisible, se descubrir¨ªa al boxeador nost¨¢lgico de unos ¨¦xitos que nunca existieron.
Desde su esquina del ring, de la que han huido varios compa?eros, espera que se enciendan las luces para saltar a fajarse.
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