Carlos de Inglaterra

El pr¨ªncipe Carlos de Inglaterra no se considera un ut¨®pico. Su defensa del medio ambiente de las ciudades y de la creaci¨®n de un entorno atractivo para sus habitantes no lo considera una utop¨ªa, sino una postura de "puro sentido com¨²n". As¨ª lo dijo ayer en un discurso en Madrid, en la clausura de la Conferencia sobre el Futuro Europeo del Medio Ambiente Urbano, en el que el heredero de la corona brit¨¢nica dijo: "Sinti¨¦ndolo mucho, y pese a que en un art¨ªculo de la prensa brit¨¢nica se dijera recientemente que mis opiniones son ut¨®picas, tengo que decir que si incluso esta modesta serie de metas se considera ut¨®pica, mas me valdr¨ªa abandonar esta sala ahora". El pr¨ªncipe se pregunt¨®: "?Ad¨®nde hemos llegado si no somos capaces de ver que la creaci¨®n de un entorno atractivo y la conservaci¨®n de la atm¨®sfera de la Tierra son necesidades b¨¢sicas, sobre cuyos cimientos podr¨ªamos construir algo mejor. ?Esto es pedir la utop¨ªa? Seguramente no. Tiene que ser puro sentido com¨²n".Carlos, el pr¨ªncipe sin pelos en la lengua que ha levantado sus armas en los ¨²ltimos a?os en temas como la econom¨ªa, la arquitectura, la educaci¨®n y el me dio ambiente, utiliz¨® ayer la figura de Goya en su reflexi¨®n sobre las ciudades. Primero, refrescando su memoria con las seductoras im¨¢genes de Madrid como la ciudad de Goya "son algo peligrosas, por supuesto, porque dudo que ninguna ciudad fuera nunca tan perfecta como Madrid a los ojos de Goya"-, para, con semejante visi¨®n, recordar lo que en un tiempo las ciudades intentaban ser -"un lugar del que la gente pod¨ªa enorgullecerse"- y renovar su determinaci¨®n de hacer algo con las que vivimos hoy.

En contraposici¨®n a esta id¨ªlica imagen, el pr¨ªncipe record¨® , un cuadro de Goya, el de Saturno devorando a sus hijos, del que dijo que le recordaba a muchas de las ciudades de nuestros d¨ªas. "Una generaci¨®n devorando a la siguiente; una imagen apropiada, creo, para un mundo en el que parece que los urbanistas y los arquitectos han sido incapaces de prever los efectos que sus grandes proyectos pueden tener sobre sus hijos", dijo.

La conciencia ecol¨®gica del pr¨ªncipe de Gales, manifestada en variadas intervenciones que han generado cr¨ªticas y levantado polvaredas, se ha ido haciendo, con el paso del tiempo, m¨¢s personal y m¨¢s segura. No ajeno a, estas cr¨ªticas, Carlos de Inglaterra se pregunt¨® ayer, con fino sentido del humor, el porqu¨¦ de la invitaci¨®n para dirigirse a dicha conferencia. "Tal vez fuera", dijo, "porque todos los especialistas. en materia de urbanismo creyeron que ser¨ªa ¨²til contar con la presencia de un aficionado reconocido como yo para que, al final de las sesiones, pudieran alegremente afirmar que ?no dec¨ªa m¨¢s que tonter¨ªas! ".

El pr¨ªncipe Carlos no se qued¨® en manifestaciones grandilocuentes y baj¨® a la arena de los problemas m¨¢s dom¨¦sticos. Se declar¨® partidario del reciclado de los residuos dom¨¦sticos y del reciclado de materiales como los fangos cloacales -"lo crean o no, ¨¦ste es un tema que me fascina y me inquieta desde hace mucho tiempo"-, y calific¨® el autom¨®vil como "un monstruo de nuestra propia creaci¨®n" y como el objeto que "ha contribuido a la desfiguraci¨®n de nuestras ciudades m¨¢s que cualquier otra cosa desde la II Guerra Mundial", aunque sin dejar de reconocer que ¨¦l mismo contribuye con "cierta cantidad" al r¨¢pido crecimiento del di¨®xido de carbono producido por este medio.

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