La trama y la cuchilla

Jos¨¦ Vicente Roca, un alto funcionario de la delegaci¨®n de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia, fue acusado de aprovechar el falseamiento de un plano para cometer una estafa. Un edificio de Valencia fue calificado como "servicio p¨²blico" por la comisi¨®n municipal de Urbanismo, y, en el plano correspondiente fue colocada una trama que as¨ª lo indicaba. Roca constituy¨®, en uni¨®n de otras tres personas, una empresa que compr¨® el edificio por 252 millones de pesetas. Pocos d¨ªas despu¨¦s, y con el aval de un plano en el que la trama correspondiente a "servicio p¨²blico" hab¨ªa desaparecido, el inmueble fue vendido por 447,5 millones.El asunto fue denunciado y juzgado el pasado a?o. La sentencia consider¨® no probado que Jos¨¦ Vicente Roca fuera la persona que manipul¨® el plano para hacer desaparecer la trama con la ayuda de una cuchilla, por lo que no prosper¨® la acusaci¨®n de estafa, y conden¨® por negociaci¨®n prohibida a los funcionarios.Barbate, Burgos, Le¨®n

Los tribunales de justicia de todas las comunidades aut¨®nomas est¨¢n llenos de proyectos urban¨ªsticos pol¨¦micos.

El del Puerto de la Plata, de Barbate (C¨¢diz), relacionado con el caso Juan Guerra y calificado de prevaricaci¨®n por el ministerio fiscal, es uno de ellos.

El Ayuntamiento rechaz¨® en principio el plan -que preve¨ªa hoteles y 2.000 viviendas- porque no se ajustaba a la normativa urban¨ªstica de la localidad, pero lo aprob¨® tras la mediaci¨®n de Juan Guerra, hermano del entonces vicepresidente del Gobierno.

Tambi¨¦n lleg¨® a los tribunales el caso de la construcci¨®n, en el que el alcalde de Burgos, Jos¨¦ Mar¨ªa Pe?a San Mart¨ªn, y otras 11 personas fueron acusados'de distintos delitos de prevaricaci¨®n, falsedad en documento p¨²blico y cooperaci¨®n necesaria para el delito de estafa; todos ellos en relaci¨®n con operaciones urbari¨ªsticas. El alcalde burgal¨¦s espera juicio para despu¨¦s de las elecciones municipales y auton¨®micas. Pero en la mayor¨ªa de las ocasiones no pasa nada. Muchas actuaciones irregulares son legalizadas posteriormente.

As¨ª sucedi¨® con la ampliaci¨®n de un hotel de un concejal de Benidorm, emprendida con una licencia concedida por el Ayuntamiento a pesar de que el proyecto hab¨ªa recibido un cu?o rojo en el Colegio de Arquitectos. La ampliaci¨®n supon¨ªa la eliminaci¨®n ?le una calle en proyecto. El Plan General de Urbanismo, que se encontraba en revisi¨®n, legaliz¨® la operaci¨®n.

La picaresca ha llegado a extremos como el de Le¨®n, donde el Ayuntamiento recalific¨® unos terrenos a petici¨®n de una persona inexistente, el fantasma C¨¢ndido, en una operaci¨®n supuestamente promovida por propietarios de- los terrenos afectados que habr¨ªa supuesto un volumen de negocio de 20.000 millones de pesetas.