Un polic¨ªa que ejerc¨ªa de taxista en Barajas muerde a un agente municipal

Gabriel S. R., de 47 a?os, miembro del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y taxista en sus ratos libres, arranc¨® de un mordisco parte de la mejilla derecha al polic¨ªa municipal Vitorio H. M., de 42 a?os, en el aeropuerto de Madrid-Barajas. El funcionario municipal recibi¨® la dentellada tras una discusi¨®n entablada durante la noche del mi¨¦rcoles por la sospecha de que el taxista ocasional -que ha solicitado la baja en la polic¨ªa- eleg¨ªa a los viajeros seg¨²n el trayecto m¨¢s conveniente.

Un ap¨®sito cubr¨ªa ayer la parte derecha del rostro del polic¨ªa municipal, casado y con dos hijos, para proteger de infecciones una herida que reproduce en relieve la dentadura abierta del taxista. El agredido dijo ayer sobre el conductor que le dio un bocado en la cara: 'Parec¨ªa un perro cuando se agarra".El conductor fue puesto a disposici¨®n jucicial, acusado de agresi¨®n a un agente de la autoridad, y posteriormente sali¨® en libertad. Fuentes policiales han se?alado que a pesar de que el taxista ha pedido la baja en el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa ¨¦sta a¨²n se est¨¢ tramitando, por lo que sigue sierido funcionario.

La situaci¨®n que origin¨® la detenci¨®n de Gabriel S. comenz¨® sobre las diez de la noche del mi¨¦rcoles en la terminal internacional del aeropuerto. Seg¨²n el relato del agente herido, un compa?ero discut¨ªa con un taxista porque se hab¨ªa puesto el primero en la cola, sin guardar el turno. Al ser re:Drendido contest¨®. "Pasa de m¨ª, cargo [viajeros] porque quiero". Cuando el polic¨ªa le pidi¨® que se lJentificara replic¨®: "No me sale de los cojones".

En ese momento, Vitorio H. se acerc¨® al taxi tras ser alertado por su compa,nero para que detuviera el veh¨ªculo y le dijo: "Tranquilicese,por favor". Fue entonces cuando el taxista se abalanz¨® sobre ¨¦l y se qued¨® agarrado a su mejilla con los dientes.

"El taxista ni razonaba ni escuchaba", relat¨® ayer el polic¨ªa agredido. 'La gente no sab¨ªa qu¨¦ pasaba y se empez¨® a poner en contra de la polic¨ªa, como siempre que tenemos que utilizar la fuerza. El detenido, mientras era obligado a entrar en el coche celular mordi¨® a otro compa?ero en el costado pero la camisa le protegi¨® de una herida mayor", dijo Vitorio. H.

"Buscones" al volante

En la comisar¨ªa, el taxista declar¨® que dej¨® el taxi en la cola y entr¨® para ver a qu¨¦ hora llegaba el vuelo de un amigo. En su camino de vuelta se puso a hablar con un transeunte, momento en el que un polic¨ªa se le acerc¨® y dijo que se identificara, a lo que ¨¦l se neg¨® porque consider¨® que no hac¨ªa "nada malo". El presunto agresor denunci¨® haber sido tirado al suelo y asegur¨® no recordar haber mordido a nadie.

El silencio m¨¢s absoluto se cern¨ªa ayer sobre el gremio de los taxistas del acropuerto, que pueden realizar hasta cuatro carreras por turno diario. Fucrites cercanas a la investigaci¨®n declararon que el agresor pertenece a la mafia del taxi, nombre por el que se conocen a los que abusan de los viajeros, para quienes la pieza m¨¢s cotizada son los extranjeros. En ocasiones, los clientes son sometidos a preguntas para elegir el sablazo m¨¢s adecuado.