Tecnolog¨ªa, ?infierno o para¨ªso?
Los ingenieros espa?oles debaten, despu¨¦s de 40 a?os, la cultura t¨¦cnica de final de siglo
JOS? F. BEAUMONT "Todo lo que no sea el aire que respiramos ha sido transformado, y llegar¨¢ un d¨ªa en que incluso el aire ser¨¢ depurado debido al crecimiento de las ciudades y a la poluci¨®n". El ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, y escritor, Juan Benet ha constatado en esta frase poco optimista el sentir de muchos sectores de la sociedad frente a las consecuencias del desarrollo tecnol¨®gico. ?l y otros 2.000 ingenieros espa?oles estudian estos d¨ªas en Madrid, con ocasi¨®n de su tercer congreso nacional, la conservaci¨®n de los recursos naturales, la ingenier¨ªa para el medio ambiente y la calidad de vida.
Distanciados de las obsesiones corporativas de otras ¨¦pocas, los ingenieros del final de siglo quieren aportar sus ideas "al pacto de competitividad que estudian el Gobierno, los partidos y los sindicatos, y sobre los problemas con repercusi¨®n tecnol¨®gica que tiene planteados la sociedad espa?ola en v¨ªsperas del mercado ¨²nico europeo"'. As¨ª lo ha reconocido Manuel Garc¨ªa Gil de Bernab¨¦, ingeniero naval y presidente de este congreso.Seg¨²n se deduce de las aportaciones m¨¢s significativas (ingenieros de la ¨ªndole de Jaime Torroja, Albert Vilalta, Manuel Abej¨®n, Luis Mendoza, Joan Maj¨®, Jaime Lamo de Espinosa, entre otros), Espa?a tiene planteado un problema de ¨¢mbito planetario centrado en el dilema desarrollo frente a medio ambiente.
Respeto al medio ambiente
Y en lo que todos se muestran de acuerdo es en la necesidad de continuar de modo equilibrado y sostenido el proceso de des¨¢rrollo tecnol¨®gico y econ¨®mico, pero con un absoluto respeto a la naturaleza y al medio ambiente, "ya que, de otro modo, podr¨ªamos llegar a hacer inhabitable el planeta", como ha se?alado Juan Jos¨¦ Alzugaray, presidente del Instituto de la Ingenier¨ªa de Espa?a.
Algunos ingenieros han expresado cr¨ªticas a la actual situaci¨®n. Es el caso de Gabriel Barcel¨®, presidente de la Federaci¨®n de Ingenieros Industriales.
"No es que los ingenieros se encuentren alejados de la sociedad", dice Barcel¨®, "sino que los ¨®rganos de decisi¨®n no tienen suficientemente en cuenta los criterios de los ingenieros, utiliz¨¢ndose ¨²nicamente sus resultados y no sus criterios". Barcel¨® se queja tambi¨¦n de que falta en Espa?a un proyecto tecnol¨®gico global.
Los necesarios estudios del impacto ecol¨®gico que producen las obras de ingenier¨ªa en el medio ambiente, la erosi¨®n, la contaminaci¨®n de las aguas son algunas de las preocupaciones expresadas de forma m¨¢s solidaria por los participantes en este congreso, que ser¨¢ clausurado el pr¨®ximo viernes. La "¨¦tica del territorio" debe presidir las actuaciones de todas las ramas de la ingenier¨ªa.
Naturalmente los ingenieros espa?oles tambi¨¦n reflexionan sobre las nuevas tecnolog¨ªas de la informaci¨®n, que, en opini¨®n de Mariano Mediana, ingeniero de Telecomunicaci¨®n y ponente en el actual congreso nacional, "est¨¢n abriendo las puertas del siglo XXI".
Los 50.000 se?alados
J. F. B.Cerca de 50.000 ingenieros de 10 especialidades tienen en Espa?a una buena parte de responsabiliad a la hora de relacionar la tecnolog¨ªa con el entorno. De acuerdo con diversos estudios, el ingeniero de los a?os noventa poco tiene que ver con la figura tradicional del "profesional de alto status que trabajaba por cuenta propia o para la Administraci¨®n y que acababa en puestos pol¨ªticos o dirigiendo las principales empresas".
El ingeniero de hoy es un empleado por cuenta ajena, en el sector privado o estatal -m¨¢s un asalariado que un profesional liberal-, que no tiene tantas ambiciones pol¨ªticas y al que le preocupa su formaci¨®n con vistas a la integraci¨®n con otros ingenieros en el campo de a competitividad europea.
Los ingenieros espa?oles despertaron a las preocupaciones colectivas en 1919, cuando, "al calor de las ideas regeneracionistas impulsadas por Joaqu¨ªn Costa, surgieron al principio del siglo como un movimiento moral que m¨¢s tarde se transform¨® en una reflexi¨®n sobre la esencia de Espa?a".
Modernizar Espa?a
Con ocasi¨®n del primer congreso celebrado aquel a?o, el escritor y fil¨®sofo Jos¨¦ Ortega y Gasset acog¨ªa con efusi¨®n "el prop¨®sito de los ingenieros de modernizar Espa?a". El periodo 1911 a 1918, al amparo de la neutralidad frente al conflicto mundial, supuso un avance de prosperidad material desconocido hasta entonces en un pa¨ªs como Espa?a que, no obstante, se encontraba retrasado respecto a Europa.
Por segunda vez, los ingenieros se reunieron en un congreso nacional en 1950, bajo otras circunstancias, en plena autarqu¨ªa. Entonces el clima pol¨ªtico y social se amparaba en enunciados ret¨®ricos que trataban de conformar la idea de una revoluci¨®n pendiente.
El actual tercer congreso est¨¢ marcado por una idea clave: el hecho tecnol¨®gico ha desbordado a la sociedad. Lo ha explicado Juan Benet: "La tecnolog¨ªa ya no responde a una demanda social, sino que ella misma ha generado la demanda. Por todo ello' habr¨ªa que devolver a la sociedad la soberan¨ªa de la demanda".
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