Los espa?oles perdieron 590.000 millones de pesetas en el juego durante 1990

Los espa?oles perdieron 589.299 millones de pesetas en bingos, casinos y m¨¢quinas tragaperras durante 1990, cantidad que en su mayor parte dej¨® un colectivo de jugadores calculado en 900.000 personas, seg¨²n datos de la Comisi¨®n Nacional del Juego, que supervisa el juego privado.La mayor parte de este dinero qued¨® en las tragaperras, que supusieron para las empresas unos ingresos de 360.421 millones de pesetas, es decir, un 61 % del total gastado por los jugadores.

Despu¨¦s le siguen los bingos, con 189.811 millones de pesetas, que representan el 31,5% del total, y a gran distancia los casinos, donde durante el ¨²ltimo a?o los espa?oles perdieron 43.067 millones -un 7,3% del dinero perdido en conjunto-, seg¨²n las cifras manejadas por el Ministerio del Interior.

La evoluci¨®n del juego privado en 1990 respecto a a?os anteriores demuestra que los casinos est¨¢n perdiendo ingresos y clientela, si bien la reducci¨®n en el n¨²mero de visitantes se refiere m¨¢s al jugador ocasional que al habitual, explic¨® el director de la Comisi¨®n Nacional del Juego, Santiago Mendioroz.

En este sentido, una encuesta de Interior apunta que un colectivo de apenas 18.000 personas acumula el 88% de todo el gasto efectuado en los casinos; estos clientes son los que al menos van dos o tres veces por semana al casino y se gastan una media de 2.105.000 pesetas anuales.

Al igual que en los casinos, en los b1 ngos la tendencia general es la disminuci¨®n de su n¨²mero de clientes, que, sin embargo, juegan m¨¢s dinero, es decir, son mas profesionales.

La clientela m¨¢s fiel a este juego est¨¢ constituida, seg¨²n la misma encuesta de Interior, por un 0,71% de la poblaci¨®n mayor de 18 a?os que acude a las salas dos o tres veces por semana como m¨ªnimo, es decir, unas 220.000 personas que acumulan el 65% del gasto en bingos. La misma estad¨ªstica adjudica a estas personas unas p¨¦rdidas medias anuales de 550.000 pesetas.

En cuanto a las tragaperras, la nueva normativa promulgada para estas m¨¢quinas en mayo de 1990 ha supuesto una disminuci¨®n en su n¨²mero global, que ha pasado de 325.000 unidades a finales de 1989 a 272.521 a finales del ¨²ltimo a?o.

Sobre su uso, la encuesta de Interior calcula que aproximadamente un 2,42% de los mayores de edad practican este juego habitualmente, o lo que es lo mismo, unas 725.000 personas que realizan aproximadamente el 89% del gasto y pierden 442.000 pesetas anuales.