Las verdades de Edith
La crudeza de la primera ministra provoca tormentas dentro y fuera de Francia
A las cinco semanas de su designaci¨®n como primera ministra de Francia, Edith Cresson ha despertado muchas m¨¢s tormentas en el interior y exterior de su pa¨ªs que su predecesor, Michel Rocard, en sus tres a?os en el puesto. Cresson habla con una crudeza ins¨®lita en un dirigente pol¨ªtico occidental. Los japoneses, afirma la primera ministra, aspiran a "joder" econ¨®micamente a los norteamericanos y europeos; un 25% de los ingleses, proclama, son homosexuales; los medios burs¨¢tiles franceses, dice, le importan "un comino".
La primera mujer que ocupa la jefatura del Gobierno franc¨¦s suele aparecer en p¨²blico con las mangas recogidas hasta los codos. Esa actitud arremangada simboliza su voluntad de ir directamente al grano. El d¨ªa de su toma de posesi¨®n, Cresson concedi¨® una larga entrevista a la cadena televisiva Antenne 2 en la que expres¨® su voluntad de promover una pol¨ªtica proteccionista europea frente a la "agresividad" y la "competencia desleal" de los industriales y comerciantes del pa¨ªs del Sol Naciente.Cresson dijo en voz alta lo que piensa mucha gente en Estados Unidos y Europa, pero la franqueza de los comentarios de la denominada "castellana de la fortaleza europea" ha despertado la indignaci¨®n de los japoneses. El pasado 29 de mayo, el embajador franc¨¦s en Tokio fue convocado al Ministerio de Asuntos Exteriores japon¨¦s para recibir una protesta formal; el pol¨ªtico conservador Shintaro Ishitara dice que Cresson es "s¨®lo una mujer de edad madura un tanto hist¨¦rica"; los caricaturistas del diario Asahi la representan como una borracha.
Estos d¨ªas, grupos nacionalistas japoneses se manifiestan frente a la sede de la representaci¨®n diplom¨¢tica gala en Tokio, y algunos de ellos han llegado a asaltar una sala de exposiciones de Peugeot. Esos manifestantes afirman que Cresson llama a los japoneses "enanos amarillos" y "horrmigas", calificativos que la primer ministro francesa no consta que haya empleado.
Cresson, en cambio, compara el panfleto nacionalista de Ken Ishihara El Jap¨®n que dice no al Mein kampf de Hitler. Ese texto, dice, prueba la "voluntad nipona de dominar el mundo". Los portavoces del Hotel Matignon explican que Cresson est¨¢ en realidad fascinada por la eficacia de los japoneses.
Si Cresson comenz¨® disparando su artiller¨ªa pesada contra los japoneses, pronto algunos medios franceses comprendieron que tampoco estaban a salvo de la crudeza de su lenguaje. A los tres d¨ªas de su nombramiento, tras haber calmado los esp¨ªritus de los medios financieros y burs¨¢tiles con la confirmaci¨®n de Pierre Beregovoy como ministro de Econom¨ªa y Finanzas, Cresson lanz¨® una frasecita que estremeci¨® a esos mismos medios. "La Bolsa", dijo, "me importa un comino".
La oposici¨®n de derechas tampoco ha escapado a sus puyazos. Tras recibir algunos asaltos m¨¢s bien poco elegantes por su condici¨®n de mujer, Cresson dispar¨®: "Los hombres no son irremplazables en ninguna parte, salvo en la vida privada". Al diputado giscardiano Fran?ois d'Aubert, que la hab¨ªa comparado con Madame de Pompadour, la primera ministra respondi¨®: "Yo soy, en efecto, la favorita, pero de mis electores".
El ¨²ltimo esc¨¢ndalo
El ¨²ltimo esc¨¢ndalo provocado por la franqueza de Cresson ha sido el desencadenado por la publicaci¨®n en el diario ingl¨¦s The Observer de una entrevista concedida por Cresson hace cuatro a?os. Cresson dijo entonces: "Los anglosajones no se interesan por las mujeres", y tambi¨¦n: "Uno de cada cuatro ingleses es homosexual".En medio del coro de cr¨ªticas a Cresson, el publicista Jacques Seguela, el hombre que prepar¨® las victoriosas campanas presidenciales de Mitterrand, defiende a capa y espada a la primera ministra. En su opini¨®n, Cresson habla y act¨²a con "el pragmatismo caracter¨ªstico de las mujeres". El problema, dice el publicista, es que "los medios de comunicaci¨®n son machos y machistas" y no aciertan a digerir las palabras de una mujer, los valores de una mujer, el f¨ªsico de una mujer".
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