R¨¦plica de la ONCE
En nombre del Consejo General de la ONCE que presido y con referencia al art¨ªculo0publicado en el d¨ªa de ayer, en su editorial Evitar sospechas, debo hacerle las siguientes observaciones:
1?.- De los 300.000 millones de pesetas autorizada& por el Gobierrio de ingresos por ventas del cup¨®n, 150.000 millones van al pago de premios; adem¨¢s, hay que pagar su salarlo a m¨¢s de 28.000 trabajadores y sus pensiones a m¨¢s de 12.000 pensionistas. Asimismo, para cumplir los Servicios Sociales en 1991, es preciso invertir la cantidad de 25.000 millones de pesetas.
Por otra parte, para producirla incorporaci¨®n del colectivo de la ONCE en la Seguridad Social hay que abonar en los pr¨®ximos a?os m¨¢s de 70.000 millones de pesetas; por consiguiente, es imposible sostener las cifras de excedentes que su peri¨®dico da, tanto las pesimistas como las optimistas. En definitiva, puede afirmarse que esas cifras obedecen a la m¨¢s absoluta falsedad.
2?.- Nos gustar¨ªa much¨ªsimo que fuera cierto que la Asistencia Social a los ciegos y a otros minusv¨¢lidos, que ayudamos a trav¨¦s de la Fundaci¨®n, estuviera totalmente cubierta, como se afirma, en su peri¨®dico.
La verdad es que, aun cuando se ha avanzado much¨ªsimo en estos ¨²ltimos a?os en dignificar la vida social de los ciegos y otros minusv¨¢lidos, queda todav¨ªa un gran trecho que recorrer. El d¨ªa que la integraci¨®n social se consiga, la ONCE habr¨¢ cumplido su misi¨®n.
Nos extra?a y nos parece lamentable la aseveraci¨®n que su peri¨®dico hace en este sentido. Ah¨ª queda nuestra m¨¢s firmeprotesta esperando la comprensi¨®n de usted y de ese medio de tanta relevancia en Espa?a.
3?.- Respetamos las opiniones que se vierten sobre nuestras inversiones, pero estamos seguros de que, si el Gobierno aplicara las limitaciones que ustedes proponen, quebrar¨ªa el principio de igualdad consagrado en la Constituci¨®n.
"Los privilegios fiscales" a que se alude, son compensados de sobra con Servicios Sociales que tienen un coste econ¨®mico muy superior y que as¨ª lo percibe la sociedad espa?ola, de la que recibimos m¨¢s ayuda cuantos m¨¢s ataques nos proporcionan sectores con intereses muy concretos y que desean ver a los ciegos y a los m'nusv¨¢lldos en su puesto en la sociedad; es decir, en las capas pobres de ¨¦sta.
4?.- Desde que la democracia se implant¨® en la ONCE, las auditor¨ªas las realiza una empresa de reconocido prestigio y est¨¢n a disposici¨®n de los poderes p¨²blicos que gobiernan el Estado de Derecho de Espa?a.
Nosotros vamos a continuar nuestra labor de prestaci¨®n de Servicios Sociales tratando de
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conseguir, en primer lugar, el m¨¢ximo de empleo para ciegos y minusv¨¢lidos.
Asimismo, vamos a trabajar para lograr, en igualdad de condiciones con los dem¨¢s en la econom¨ªa social de mercado, el m¨¢ximo de recursos econ¨®micos para financiar estos servicios.-
presidente del Consejo General de la ONCE. .
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