Un ministro y una obsesi¨®n
La gloria de la resistencia de la Defensa Territorial eslovena en contra del Ej¨¦rcito de ocupaci¨®n yugoslavo recae en un personaje: Janez Jansa, el ministro de Defensa de Eslovenia. Jansa tiene 33 a?os y una sola obsesi¨®n: las armas y el ej¨¦rcito. Activista de las juventudes comunistas, la aspiraci¨®n de conseguir la creaci¨®n d¨¦ un ej¨¦rcito mononacional (teor¨ªa contraria a la de las Fuerzas Armadas yugoslavas) le granje¨® enemigos en la Liga de los Comunistas de Eslovenia. Jansa fue expulsado.Entonces asumi¨® la direcci¨®n de una revista en cuyas pacriticaba a la c¨²pula pol¨ªtica eslovena. Posteriormente, Jansa descubri¨® el liberalismo y desarroll¨® la teor¨ªa del servicio sustitutorio al servicio en las fuerzas armadas, granje¨¢ndose nuevos enemigos entre la c¨²pula eslovena y la militar en Belgrado.
La publicaci¨®n de un documento militar, considerado confidencial, en 1988 le cost¨® 18 meses de c¨¢rcel. El proceso a Jansa y otros tres c¨®mplices en la revelaci¨®n de secretos militares marc¨® el inicio de la primavera pol¨ªtica eslovena. Al salir de la c¨¢rcel, Jansa se reintegr¨® a la vida pol¨ªtica fundando el primer partido de la oposici¨®n a los comunistas: la Uni¨®n Democr¨¢tica Eslovena.
Conocido como el halc¨®n en el Gobierno de Lojze Petele, este joven con cara de preso de un campo de concentraci¨®n, que no fuma ni sonr¨ªe, se empe?¨® en construir la defensa territorial eslovena. El inicio del conflicto b¨¦lico le lanz¨® al estrellato: por fin pudo poner en pr¨¢ctica sus largos estudios.
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