Major presenta un plan para mejorar la calidad de los servicios p¨²blicos
El primer ministro brit¨¢nico, John Major, lanz¨® el lunes la Carta de los derechos ciudadanos, calificada como "un programa para una d¨¦cada" que ser¨¢ "fundamental para la pol¨ªtica de este Gobierno durante los noventa". Entre los principales puntos que recoge el proyecto destacan importantes reformas en servicios p¨²blicos estatales (ferrocarriles, Correos y otros) orientadas a mejorar su funcionamiento y apoyar al mismo tiempo los derechos de los consumidores. El programa prev¨¦ la privatizaci¨®n de servicios.La Carta, esperada durante mucho tiempo, requerir¨¢ un gran volumen de legislaci¨®n para hacer efectivas las m¨¢s de 70 propuestas, muchas de las cuales tienen que ser a¨²n explicadas con m¨¢s precisi¨®n. Los conservadores esperan que la abundancia de detalles adicionales y anuncios - muchos de los cuales esperan que sean muy populares- conseguir¨¢n mantener su popularidad durante el verano y el oto?o, mientras se acercan las pr¨®ximas elecciones generales. Aunque la Carta utiliza muchas de las herramientas de la d¨¦cada Thatcher -competitividad, desregulaci¨®n y privatizaci¨®n-, su compromiso con los servicios p¨²blicos marca un cambio que nunca hubiera promovido el anterior primer ministro, Margaret Thatcher, en opini¨®n de los tories.
Reacci¨®n laborista
Con los servicios p¨²blicos como eje principal de la batalla por las elecciones generales del pr¨®ximo oto?o, el paquete de medidas fue saludado con burlas por el partido Laborista, prevenido por las organizaciones de consumidores acerca del coste que supondr¨¢ una mejor¨ªa de los patrones de calidad. El partido Liberal defini¨® al proyecto como una Carta para los consumidores, y no para los ciudadanos. Major insisti¨® en que algunas de las medidas podr¨ªan autofinanciarse y que el programa consiste en "encontrar los mejores caminos para convertir el dinero recaudado en servicios m¨¢sd eficaces".El primer ministro present¨® al conjunto de medidas como "el m¨¢s amplio y extenso acometido por Gobierno alguno", para establecer patrones de calidad y proporcionar unos servicios p¨²blicos de los que los propios funcionarios se sientan orgullosos. El prop¨®sito, dijo, ser¨ªa aumentar los niveles de calidad en la totalidad de los servicios p¨²blicos para hacer de ellos los mejores y que los ciudadanos puedan sentirse confiados.
El proyecto ha sido recibido con burlas y risas por parte de los parlamentarios laboristas. El l¨ªder de esta formaci¨®n, Neil Kinnock, declar¨® que lo ofrecido es "muy poco y muy tarde", para un Gobierno que lleva 12 a?os destrozando los servicios p¨²blicos. La Carta es "una mezcla de lo tard¨ªo, lo ineficaz, lo impreciso y lo perjudicial"... dijeron, a lo que ha respondido el primer ministro Major con acusaciones acerca de la mala educaci¨®n de los dirigentes laboristas.
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