Bob Beamon: "Ten¨ªa que suceder alg¨²n d¨ªa"

S. S. La prensa fue un¨¢nime: "Un r¨¦cord del a?o 2000". Sucedi¨® el 18 de octubre de 1968, a las 15.46, en el estadio Ol¨ªmpico de M¨¦xico. Bob Beamon, de 22 a?os, protagoniz¨® la haza?a m¨¢s impresionante del atletismo. En su primer intento en la final de longitud salt¨® 8,90 metros, 55 cent¨ªmetros m¨¢s que el r¨¦cord mundial. Ayer, Beamon recibi¨®, en su casa de Miami, la noticia de que su marca hab¨ªa sido superada: "Era inevitable. Ten¨ªa que suceder alg¨²n d¨ªa".

Beamon era un excelente atleta. Pose¨ªa la tercera mejor marca mundial, con 8,33 metros, y acud¨ªa a M¨¦xico como favorito. Era un talento extraordinario, pero le faltaba madurez. M¨¦xico era su rev¨¢lida.

El salto de Beamon reuni¨® todas las condiciones necesarias para alcanzar su estatura m¨ªtica. El lugar fue decisivo. La ciudad de M¨¦xico est¨¢ situada a 2.246 metros sobre el mar. Esto significa que la densidad del aire es un 25% menor que en Tokio. La rebaja de la resistencia del aire ayuda fundamentalmente a los velocistas y saltadores.

En los momentos previos al salto, una tormenta se cern¨ªa sobre M¨¦xico. El aire era de una pureza extraordinaria: ox¨ªgeno en proporciones may¨²sculas. El siguiente elemento decisivo fue la velocidad del viento: 2 metros por segundo a favor de Beamon.

Los ingredientes t¨¦cnicos acabaron por perfilar una marca inolvidable. Un an¨¢lisis biomec¨¢nico realizado en la antigua RDA revel¨® que la velocidad de Beamon en los ¨²ltimos 10 metros fue de 10,71 metros por segundo, un registro impensable para un atleta que no era un velocista. Beamon se mantuvo en el aire 93 cent¨¦simas de segundo. El estudio revel¨® una coincidencia curiosa: la velocidad durante su trayectoria a¨¦rea fue de 8,90 metros por segundo. Su salto alcanz¨® los 8,90 metros.

Uno de los datos m¨¢s espectaculares fue la altura que logr¨® Beamon en el vuelo. En el cenit de la curva, el atleta estadounidense lleg¨® hasta 1,97 metros. La altura normal en un buen salto ronda 1,85 metros. La ca¨ªda fue perfecta. Beamon realiz¨® un movimiento extra?o: alarg¨® su ¨²ltima zancada de una forma incre¨ªble y encontr¨® una impulsi¨®n m¨¢s larga y m¨¢s r¨¢pida. El resultado fue un salto de 8,90 metros. La marca conmocion¨® al mundo. En el estadio estaba a punto de comenzar la final de 400 metros, que tambi¨¦n ver¨ªa un r¨¦cord memorable protagonizado por los norteamericanos Evans, James y Freeman.

Fue precisamente Roori Freeman quien ayer llam¨® a Beamon. "Eran aproximada mente las siete de la ma?ana y el tel¨¦fono son¨®. Era Roon. Por un momento pens¨¦ que ten¨ªa una manzana en su garganta. Era evidente que quer¨ªa decirme algo, pero no sab¨ªa c¨®mo empezar. Finalmente logr¨® darme la noticia", explic¨®.

El ex plusmarquista mundial de longitud dijo que esperaba esta noticia, aunque siempre crey¨® que ser¨ªa Carl Lewis quien acabar¨ªa con su r¨¦cord: "Era inevitable que esto suceder¨ªa alg¨²n d¨ªa, pero yo hab¨ªa asumido que esa persona ser¨ªa Lewis. Eso es lo que me ha sorprendido", declar¨®.

Felicitaci¨®n

Beamon felicit¨® a Powell: "Espero que sea feliz en la cumbre y que lleve esta especialidad a otra dimensi¨®n. Tambi¨¦n me gustar¨ªa alabar a Lewis por su soberbia demostraci¨®n, en especial en los dos saltos que hizo tgras el r¨¦cord de Powell". Carl Lewis, por su parte, asumi¨® la derrota: "Estoy orgulloso de lo que he hecho. Hace un a?o ten¨ªa mi pierna escayolada. Ahora, en una semana, he batido mis marcas en 100 metros y salto de longitud". Lewis se mostr¨®, sin embargo, frustado por el desarrollo de la prueba. "He realizado la mejor serie de la historia, y, sin embargo, no he podido conseguir la victoria. Powell tiene m¨¦rito, pero todo lo ha conseguido en un salto".