Yeltsin no atrae inversi¨®n alemana
El presidente de la Federaci¨®n Rusa, Bor¨ªs Yeltsin, regres¨® ayer a Mosc¨² sin haber conseguido convencer a los empresarios y banqueros alemanes de su prop¨®sito de instaurar una aut¨¦ntica econom¨ªa de mercado en Rusia y, consiguientemente, de la viabilidad de sus inversiones. En el terreno pol¨ªtico, el protocolo dise?ado por Bonn y el escaso eco popular de la visita han conseguido dejar claro que la nueva Alemania prefiere seguir entendi¨¦ndose con el l¨ªder sovi¨¦tico, Mijail Gorbachov, y con su resucitado ministro de Exteriores, Edvard Shevardnadze.
Yeltsin, sin embargo, tuvo ayer finalmente, en su tercera y ¨²ltima jornada en Alemania, algo del calor popular que hab¨ªa faltado durante sus dos primeros d¨ªas en Bonn: un peque?o ba?o de multitud que le aclam¨® agitando la bandera rusa en Stuttgart, cuando se pase¨® por la plaza del mercado a primeras horas de la ma?ana, y otro afectuoso recibimiento en Potsdam, cerca de Berl¨ªn, cuando a mediod¨ªa lleg¨® para almorzar en el palacio de Cecilienhof con el ministro de Asuntos Exteriores alem¨¢n, Hans Dietrich Genscher, y el ministro presidente de Brandeburgo, Manfred Stolpe.Con toda seguridad, al l¨ªder ruso, que posteriormente visit¨® un cuartel de las tropas sovi¨¦ticas a¨²n estacionadas en Alemania, no se le escap¨® el significado simb¨®lico del lugar, el palacio de estilo Tudor donde en verano de 1945 se celebr¨® la conferencia de Potsdam, en la que se decidieron las cuatro zonas de ocupaci¨®n de la Alemania derrotada. Las tropas sovi¨¦ticas deben abandonar Alemania antes de finales de 1994.
Calmar temores
En Stuttgart, la capital de Bade-W¨¹rtemberg, y el centro de la alta tecnolog¨ªa germana, el presidente ruso trat¨® de calmar los temores levantados en el mundo financiero por la toma bajo su control el viernes por el Parlamento ruso de los dos grandes bancos sovi¨¦ticos (el Gosbank y el Vneshekonombank), asegurando que la operaci¨®n ten¨ªa como fin la creaci¨®n de una uni¨®n bancaria interrepublicana.Yeltsin volvi¨® a insistir en que su Gobierno se hac¨ªa responsable de los pagos de la deuda, recientemente renegociada con el Grupo de los Siete, que ha permitido un aplazamiento del pago de los intereses, aunque la gran banca alemana se mostraba en desacuerdo con la decisi¨®n.
Yeltsin neg¨®, asimismo, los rumores que aseguran que las reservas de oro de la URSS pr¨¢cticamente han desaparecido. "No est¨¢n exhaustas", dijo, "y estamos en condiciones de recuperar el nivel n¨®rmal de las reservas de oro en Rusia antes de un a?o. Rusia controla ahora la protecci¨®n de las reservas y ni un gramo de oro desaparecer¨¢ sin el permiso de Rusia".
La visita de Yeltsin ha evidenciado los problemas que dificultan la inversi¨®n alemana en su pa¨ªs, el primero de ellos su imagen populista, que hace dudar a los inversores sobre su capacidad para llevar a cabo la instauraci¨®n de una econom¨ªa de mercado sin dejarse tentar por medidas proteccionistas. El propio Gobierno de Bonn parece pensar lo mismo al negarse a garantizar los cr¨¦ditos a los inversores alemanes que decidan apostar por Rusia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.