Abril Martorell reclama la ayuda del sector privado para la reforma sanitaria

Fernando Abril Martorell, presidente de la Comisi¨®n de An¨¢lisis y Evaluaci¨®n del Sistema Nacional de Salud, pidi¨® ayer al sector privado que colabore en un debate sereno y ayude al Gobierno en la transformaci¨®n del sistema sanitario. Abril Martorell inaugur¨® ayer, junto a Ernesto Ek¨¢izer, director de Cinco D¨ªas, las jornadas La sanidad espa?ola, ante el futuro. La participaci¨®n del sector financiero, organizadas por ese diario. En el encuentro participan representantes de las principales compa?¨ªas de seguro libre.

Abril Martorell, en respuesta a Francisco Carre?o, presidente de ASISA, consider¨® "urgente la construcci¨®n de un estado de opini¨®n con prestigio para que la clase pol¨ªtica pueda acometer la reforma. Hay que tener la prudencia del tiempo; un tema de 20 a?os no se endereza en dos meses". "En este sentido", continu¨®, "Farmaindustria debe entender -aunque le suponga en un primer momento disminuci¨®n de ventas- que empe?¨¢ndose en la postura de que las medicinas sean gratis no va a llegar muy lejos".El m¨¢ximo responsable del informe Abril, que reclama mayor protagonismo del sector privado en la asistencia sanitaria, desgran¨® "la importancia econ¨®mica extraordinaria" del sector sanitario y los elementos b¨¢sicos que plantea su informe para la reforma. "Los costes de Sanidad aparecen fragmentados y se ha hecho un esfuerzo meritorio", dijo. "En 1992 se espera un gasto sanitario total de cuatro billones de pesetas. ?ste es, sin duda, un gasto procupante, pero, visto desde la otra cara de la moneda, es el primer sector productivo del pa¨ªs, absorbe a gran parte del sector servicios y en unos a?os ser¨¢ m¨¢s importante que todo el sector primario".

El motivo de ese crecimiento del gasto, a su juicio, hay que buscarlo en "los deseos de la sociedad; la gente est¨¢ dispuesta a gastar en su propio bienestar, y mete, en el conjunto de la sanidad, otras cosas". Por ello, ese motor de progreso puede convertirse en una lacra para el sistema. "Si no se pone l¨ªmites a las prestaciones, no quedar¨¢ m¨¢s opci¨®n que el racionamiento, y esto tiene un desgaste terrible para los gobiernos. La convivencia democr¨¢tica no se puede asentar sobre la utop¨ªa de que todo es posible y gratuito. Eso conduce a un desgaste de la convivencia y a una deslegitimaci¨®n del sistema", argument¨® Abril Martorell. "No es lo mismo sanidad que solidaridad", explic¨®, "y no todo lo que se llama gasto sanitario se merece el esfuerzo de la solidaridad. Esa definici¨®n de gasto total merodea el 7% del PIB, y, en mi opini¨®n, no est¨¢ clara", concluy¨®.

Representantes de las compa?¨ªas comentaron tras la intervenci¨®n que el sector no puede acometer inversiones si no hay una postura clara del Gobierno.