M¨¢s del 50% de los extranjeros del f¨²tbol espa?ol proceden del Este europeo

Los espa?oles son hasta el momento los clubes de f¨²tbol que m¨¢s se han aprovechado de los cambios pol¨ªticos registrados en el antiguo bloque comunista europeo. Al margen de los sonados de Hagi, Stoichkov, Prosinecki y Suker, han generado, y se esperan m¨¢s, una treintena de fichajes orientales tan baratos que han sido sensiblemente inferiores a los costes reales que supone sacar a un joven de la cantera. Las cifras no admiten otra lectura: 37 contrataciones -m¨¢s de la mitad de los extranjeros fichados- por 2.713 millones de pesetas.

La lista de 37 futbolistas del Este europeo en la Primera Divisi¨®n espa?ola admite, o incluso exige, matizaciones. En algunos casos consta un precio estimado, dadas las reticencias de los clubes a la hora de revelar detalles de operaciones con otros que hasta ahora hab¨ªan sido obligados a tramitar sus ventas a trav¨¦s de los funcionarios estatales de sus federaciones y que, repentinamente, se hallan habilitados para el regateo. En otros, como el de Iordanov, del Sporting de Gij¨®n, los 45 millones de pesetas se abonan en plazos tan c¨®modos que el centrocampista a¨²n no est¨¢ rematado, puesto que la cantidad no se ha saldado. Habr¨ªa que advertir tambi¨¦n que Jankovic lleg¨® en 1990 al Oviedo procedente del Valladolid; que Stojadinovic, marginado por el Deportivo de La Coru?a, aterriz¨® desde Mallorca; que el Logro?¨¦s acaba de deshacerse de Micinec, y que Spasic, ahora en Osasuna, lleg¨® en 1990 a cambio de los 100 millones pagados por el Real Madrid al Partiz¨¢n de Belgrado.Tambi¨¦n cabe destacar el pintoresco asunto de Lacatus, quien, tras comprar su libertad al Fiorentina, italiano, desembols¨® 70 millones por medio de de una empresa de leasing que se lo ha prestado al Oviedo en una operaci¨®n que saldr¨¢ por unos 30 millones la temporada. Por un mundialista y ex campe¨®n de Europa, con el Steaua de Bucarest, no parece abusivo. Todav¨ªa debe de serlo menos el gasto del Mallorca para echar un vistazo a Konkalovic, que llega gratis, v¨ªa Suiza, donde esperaba ansiosamente el desenlace de la guerra que azota a su pa¨ªs, Yugoslavia.

Flecos al margen, la lista se presenta sencilla. Por arriba constan las compras multimillonarias de figuras consagradas, como Hagi, Stoichkov, Prosinecki y Suker. Por abajo, las de otros adquiridos bajo el est¨ªmulo de bueno, bonito y barato.

El f¨²tbol espa?ol, que antes echaba sus redes en Suram¨¦rica, pesca ahora en las aguas revueltas del deshecho bloque comunista, en el que las gangas y las rebajas existen. Exceptuando a los cuatro ases citados, restan 33 jugadores orientales que han costado un promedio de 42 millones. M¨¢s de la mitad de ellos vale 30 millones o menos. Adem¨¢s, los gastos de manutenci¨®n son asequibles teniendo en cuenta los par¨¢metros que imperan en los clubes reci¨¦n privatizados del Este europeo. En Checoslovaquia, por ejemplo, el Sparta de Praga es el m¨¢s generoso con unos pagos que alcanzan las 140 pesetas al mes. El Real Madrid y el Barcelona pueden comparar con lo que cuesta producir un Sanchis o un Guardiola.

Los clubes hispanos han sabido explotar r¨¢pidamente la apertura de las fronteras. Hace apenas tres a?os, tan s¨®lo una decena de orientales actuaba en ellos. La formaban Sirakov (Zaragoza), Maric (Celta), Dasaev (Sevilla), Vermezovic (Sporting), Szendrei (C¨¢diz), Vulic y Stojadinovic (Mallorca) y, bajo las fugaces ¨®rdenes del yugoslavo Skoblar, Ravnic, Miljius y Jankovic (Valladolid). Jankovic y Stojadinovic han cambiado de aires dejando a Ravnic y Szendrei como los ¨²nicos que se mantienen.

La explotaci¨®n del Este no se limita a la Primera Divisi¨®n. El Castell¨®n y el Celta ostentan un pleno yugoslavo mientras el Betis ha extendido tres cheques por otros tantos checos.