Aliados del terrorismo

"Queremos la pena de muerte" fue una demanda que alguien pronunci¨®, en tono airado, y que los micr¨®fonos de televisi¨®n recogieron entre el p¨²blico que presenciaba el desfile de los restos del catedr¨¢tico Manuel Broseta.Es evidente que algunos ciudadanos, tal vez por a?oranza de un r¨¦gimen pol¨ªtico que se caracteriz¨® por el desprecio a la vida y a la dignidad de las personas, o por otras motivaciones en las que ahora no voy a entrar, querr¨ªan dar marcha atr¨¢s al reloj de la historia, acumulando odio y muertes a las muertes y al odio que hoy ya respiramos, como disparatada receta para los males que nuestra convivencia padece.

Se convierten as¨ª, sean o no conscientes de ello, en los mejores aliados del terrorismo, no import¨¢ndoles, incluso, denigrar la memoria del propio Manuel Broseta, a quien se ha de reconocer su participaci¨®n destacada en la liquidaci¨®n del franquismo, aunque no se est¨¦ de acuerdo con el ideario pol¨ªtico que sostuvo.

Existen otros ciudadanos -desconozco su n¨²mero, pero no la raz¨®n que les asiste- que, por el contrario, se dedican a combatir la pena de muerte, tras constatar que a¨²n son demasiados los pa¨ªses que la mantienen y la aplican.

Sabemos que en el nuestro se ha producido, a lo largo de la historia, el caldo de cultivo adecuado para el florecimiento de una estirpe de patriotas, de cuyo hero¨ªsmo las gentes de paz han debido procurar, a veces sin conseguirlo, ponerse a buen recaudo. Es la estirpe de quienes practican el tiro en la nuca. Y tambi¨¦n la de quienes a?oran una sanci¨®n penal que no ser¨ªa m¨¢s que la venganza institucionalizada.-