La reina de Hollywood recupera su infancia
M¨¢s de mil invitados celebran en Disneylandia el 60 cumplea?os de Elizabeth Taylor
Si la vejez es una vuelta a la infancia, Liz Taylor no pod¨ªa menos que celebrar su 60 cumplea?os en Disneylandia. Despu¨¦s de haber realizado todas las fantas¨ªas adultas, haberse casado ocho veces y haber abusado de las drogas y el alcohol, la actriz atraves¨® la frontera de las seis d¨¦cadas acompa?ada por Mickey Mouse y Blancanieves. Taylor pag¨® lo que ning¨²n ni?o del mundo puede permitirse -150.000 d¨®lares- para tener el Castillo de la Bella Durmiente y a toda la plantilla de mu?ecos a su disposici¨®n. La propietaria de los ojos color violeta y de los diamantes m¨¢s espectaculares de Hollywood declar¨® que sigue teniendo un coraz¨®n de ni?o, lo que no le impidi¨® encargar su lista de regalos en la joyer¨ªa Tiffany's.La expectaci¨®n que despierta cualquiera de las cosas que hace la conocida como la reina sin corona de Hollywood, llev¨® a las autoridades norteamericanas a restringir el tr¨¢fico a¨¦reo sobre el complejo de Disney en California. Con esta medida pretend¨ªan evitar que los periodistas volvieran a tirarse en paraca¨ªdas, como ocurri¨® el pasado a?o en el d¨ªa de la boda de Liz con el trabajador de la construcci¨®n Larry Fortensky, de 39 a?os. Su nuevo marido, que desde que se conocieron, en una cl¨ªnica de rehabilitaci¨®n de drogodependencias, ha pasado de ser un hombre humilde a personificar la realizaci¨®n de todos los sue?os de refinamiento de la actriz, no pudo reunirse con su familia porque sus parientes no estaban invitados.
El matrimonio Fortensky / Taylor, vestido con vaqueros y cuero negro adornado con pedrer¨ªa, lleg¨® en un carruaje tirado por un caballo blanco despu¨¦s de haber hecho esperar 40 largos minutos a su millar de invitados. Desde pasadas las ocho y media de la tarde hasta la medianoche, los asistentes disfrutaron de fuegos artificiales, vinos exquisitos tra¨ªdos de todas partes del mundo y comida de gourmet. El cantante Barry Manilow interpret¨®, acompa?¨¢ndose del piano, el Happy Birthday y la melod¨ªa He conseguido atravesar la lluvia, como homenaje a una mujer para la que hacer en todo momento lo que le ha venido en gana ha sido un atractivo reto m¨¢s que una dificultad.
"Lo ha hecho todo en la vida", declar¨® la actriz e invitada Shirley McLaine, "?c¨®mo iba a renunciar a cumplir sus 60 a?os de esta manera?". Entre la corte de famosos que acudieron a la fiesta, para la que se exig¨ªa traje informal, estaban el actor Richard Gere y su mujer, la modelo Cindy Crawford; la actriz de Thelma y Louise, Geena Davis, y los cantantes Elton John y Stevie Wonder. Los actores Gregory Peck, Carrie Fisher, John Forsyth, Tom Selleck, el polifac¨¦tico David Bowie y su novia, la modelo Im¨¢n, tambi¨¦n recorrieron la hora de coche que separa Disneylandia de Beverly Hills para rendir pleites¨ªa a la m¨¢s famosa int¨¦rprete de Cleopatra.
Entre los invitados que excusaron su asistencia se encontraban el ex presidente de EEUU Ronald Reagan y su esposa Nancy y Mickey Rooney, el actor con cara de ni?o que actu¨® junto a Liz Taylor hace 49 a?os, en la primera pel¨ªcula de la actriz: National Velvet. El cantante Michael Jackson, tan amigo suyo que le prest¨® su casa para celebrar la boda, tampoco acudi¨®, aunque muchos invitados se empe?aron en apostar que se encontraba enmascarado bajo el disfraz del mu?eco que representaba a Mickey Mouse.
La actriz, que entr¨® en la rueda del starlsystem del cine cuando contaba 11 a?os, ha intentado recuperar la infancia que nunca pudo disfrutar realizando la fantas¨ªa infantil m¨¢s cara del mundo.
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