John Elliott recuerda que los brit¨¢nicos tambi¨¦n tienen su propia leyenda negra
La Reina preside en Huelva la inauguraci¨®n del primer congreso anglo-espa?ol de hispanistas
Tanto ingleses como espa?oles se consideraron elegidos por Dios para convertir al pagano y llevar a cabo una misi¨®n sagrada en su conquista de Am¨¦rica, seg¨²n expuso el historiador John Elliott en la conferencia inaugural del primer congreso anglo-hispano de hispanistas, celebrada anoche en La R¨¢bida (Huelva). La sesi¨®n estuvo presidida por la reina Sof¨ªa, acompa?ada por el presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, Manuel Chaves; el presidente de la Comisi¨®n Nacional del Quinto Centenario, Luis Y¨¢?ez, y el director del Instituto Cervantes, Nicol¨¢s S¨¢nchez Albornoz, entre otras autoridades.
John Elliott, profesor em¨¦rito de Oxford, indic¨® que "es preciso evitar apresuradas generalizaciones sobre Espa?a e Inglaterra como potencias colonizadoras La ¨²nica conclusi¨®n es que no puede haber ninguna conclusi¨®n sencilla".Para transmitir una impresi¨®n de imparcialidad, Elliott, autor de un famoso estudio sobre el conde-duque de Olivares trat¨® por igual la historia de Espa?a e Inglaterra, ambos miembros perif¨¦ricos de Europa, en su colonizaci¨®n de Am¨¦rica, lo que por lo dem¨¢s constituye el objeto de sus estudios actualmente. Seg¨²n el supuesto subyacente a la leyenda negra, explic¨® Elliott, Espa?a pose¨ªa un historial criminal sin parang¨®n en el tratamiento de sus colonias en Am¨¦rica. Sin embargo, estudios recientes sobre la Am¨¦rica brit¨¢nica "indican que los brit¨¢nicos tambi¨¦n han de confrontar, si bien retrospectivamente, una leyenda negra propia".
No se trata de saber qu¨¦ leyenda es la m¨¢s negra ni cu¨¢l es el ganador de "tan deprimente competici¨®n", "pero el hecho mismo de que las acusaciones que se dirigieron a los conquistadores se dirijan ahora a los colonos de Virginia y Nueva Inglaterra sit¨²a la actuaci¨®n de los conquistadores en un nuevo y m¨¢s amplio contexto.
A resultas de la comparaci¨®n, se pone de manifiesto que ciertos patrones de comportamiento atraviesan barreras nacionales, mientras que otros parecen ser privativos de una u otra de las sociedades colonizadoras", dijo Elliott.
Corona e Iglesia
Cualquier comparaci¨®n angloespa?ola se dificulta por el hecho de que el comienzo de ambas conquistas est¨¢n separadas por un siglo, en tanto que la Am¨¦rica espa?ola fue colonizada por una Castilla renacentista, la Am¨¦rica brit¨¢nica ser¨ªa colonizada 100 a?os m¨¢s tarde por una sociedad en que la autoridad de la corona y de la nueva Iglesia anglicana no se encontraban en su momento m¨¢s fuerte. La corona y la Iglesia tuvieron, por tanto, un papel m¨¢s importante en la Am¨¦rica espa?ola que en la brit¨¢nica.
Sin embargo, explic¨® Elliott, s¨ª tuvieron que producirse algunas imitaciones de los espa?oles por parte de los ingleses; por ejemplo, en el comienzo de la conquista, ambos pa¨ªses se tuvieron que enfrentar con "el delicado problema de c¨®mo justificar su ocupaci¨®n de tierras que pertenec¨ªan a otros". En un principio, los espa?oles arguyeron que el Papa les hab¨ªa donado las tierras. Posteriormente -lo que hizo Cort¨¦s en M¨¦xico- intent¨® el traslado voluntario de la soberan¨ªa por parte de los caciques al rey de Espa?a.
Los ingleses afrontaron parecidos problemas a comienzos del siglo. XVII. Aunque no ten¨ªan opci¨®n a la autorizaci¨®n papal, de la lectura de algunos autores se desprende que la "responsabilidad de convertir al pagano" se transform¨® en un arma en el arsenal ingl¨¦s como lo era del espa?ol, "y ambas naciones se consideraron elegidas por el Se?or para llevar a cabo una misi¨®n sagrada".
Por otra parte, ambos imperios pose¨ªan tambi¨¦n ciertos antecedentes de conquista: los espa?oles con la Espa?a musulmana y los ingleses con Irlanda. En ambos casos, los colonizadores hac¨ªan frecuentes asociaciones de los nuevos conquistados con los antiguos, y en ambos casos asociaban sus costumbres con la barbarie. Por ejemplo, los templos aztecas conquistados por Cort¨¦s son descritos como mezquitas, y cuando los aztecas combaten se les define como sol¨ªa hacerse con los moros como "perros rabiosos". En cuanto a los ingleses, consideraban a los cat¨®licos ga¨¦licos tan paganos como los indios, y la extirpaci¨®n de la barbarie se convierte en una justificaci¨®n para el dominio.
Sin embargo hab¨ªa diferencias importantes entre las actitudes espa?ola e inglesa para cada uno de los pueblos conquistados. As¨ª, los matrimonios interraciales fueron permitidos oficialmente al comienzo de la conquista en las Indias espa?olas e incluso fomentados en otros como en 1503. Esta pr¨¢ctica disminuy¨® cuando el fen¨®meno se generaliz¨®, a causa de la preocupaci¨®n por el linaje de los encomenderos espa?oles. En la Am¨¦rica brit¨¢nica, el matrimonio interracial fue casi inexistente: entre 1630 y 1676, en Massachusetts no se registra ning¨²n matrimonio legal entre indios e ingleses, lo que por lo dem¨¢s es lamentado por alg¨²n historiador ingl¨¦s de esa ¨¦poca, pues del mestizaje se hubiera derivado mayor paz y mayor facilidad de penetraci¨®n religiosa.
A juicio de Elliott, las razones de la resistencia brit¨¢nica al mestizaje no son f¨¢ciles de determinar. El color de los indios no era un grave impedimento, en un mundo en el cual la creencia generalizada era que el color de la piel estaba determinado por el grado de exposici¨®n al sol.
Babelia
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