La presi¨®n de la clase media insatisfecha

Reformar o morir, ¨¦se es el dilema en que se encuentra el sistema sanitario espa?ol. Ahora bien, una reforma sanitaria que se plantee sin tener en cuenta la sensibilidad social y la tradici¨®n cultural de los ciudadanos tiene much¨ªsimas posibilidades de fracasar, seg¨²n el director de Pol¨ªticas de Salud de la OMS, Constatino Sakellarides."No existen modelos universales, y cualquier reforma ha de tener en cuenta la sensibilidad social, porque, de lo contrario, puede fracasar por falta de legitimidad", afirmaba Sakellarides recientemente a este diario. La sensibilidad social en Espa?a est¨¢ bastante clara, a juzgar por la reacci¨®n que provoc¨® el fantasma de una posible privatizaci¨®n y la propuesta de que los usuarios paguen una parte de la prestaci¨®n, contenida en el Informe Abril.

La reacci¨®n de la opini¨®n p¨²blica demostr¨® que el sistema de Seguridad Social universal y gratuito es una conquista social muy arraigada y ya nadie se atreve a proponer f¨®rmulas como el tique moderador. "Creo que nuestro pa¨ªs no admite un sistema de tasas, ni siquiera corregido", afirma Xavier Trias, consejero de Sanidad de Catalu?a. "Otra cosa es que las prestaciones sanitarias no pueden ser ilimitadas, de modo que en el futuro tendremos que decidir, entre las nuevas, cu¨¢les incluimos en la Seguridad Social y cu¨¢les no".

Sakellarides atribuye a las presiones de una parte de las clases medias, educadas en h¨¢bitos consumistas y con elevado poder adquisitivo, las presiones que se producen en los pa¨ªses con un sistema sanitario p¨²blico organizado en forma de sistema nacional de salud, como el Reino Unido o Espa?a, para privatizar la sanidad. "La falta de eficiencia y los defectos organizativos del sistema p¨²blico est¨¢n produciendo una insatisfacci¨®n en una parte de la demanda, la econ¨®micamente m¨¢s solvente. Y si no se corrige a tiempo, cada vez arrojar¨¢ a m¨¢s usuarios fuera del sistema y aumentar¨¢ las presiones hacia la privatizaci¨®n", a?ade.

Cuatro millones de espa?oles complementan la cobertura sanitaria p¨²blica con un seguro privado destinado en la mayor¨ªa de los casos a garantizar inmediatez en la asistencia y un mayor confort. Al respecto, Sakellarides hace una clara advertencia: "Si el sistema p¨²blico espa?ol se demora en afrontar la reforma para aumentar su eficacia, mejorar su calidad y atender la demanda ahora insatisfecha, las corrientes privatizadoras pueden crecer y comprometer la actual hegemon¨ªa del sistema p¨²blico, que es el m¨¢s equitativo y el ¨²nico que garantiza el acceso de toda la poblaci¨®n a la sanidad, independientemente de la posici¨®n social".