La Madre del alcalde y sus vecinos se enfrentan al concejal de su distrito por las obras de un disco-bar

Los vecinos de la calle de Altamirano, en Arg¨¹elles, est¨¢n en pie de guerra contra la Junta de Moncloa, que ha autorizado la transformaci¨®n de un garaje de 1.100 metros cuadrados en un disco-bar. La comunidad de propietarios, en la que est¨¢ la madre del alcalde, ha pedido al Ayuntamiento que no conceda la licencia de actividades al local. El presidente del distrito, Luis Molina, asegura que no tendr¨¢ m¨¢s remedio que dar el permiso "si se cumplen las ordenanzas".

Un garaje de dos plantas del n¨²mero 35 de la calle de Altamirano se est¨¢ transformando en un inmenso disco-bar para disgusto de los vecinos. La instalaci¨®n ocupa las plantas s¨®tano y baja de gran parte de la manzana formada por las calles de Ferraz, Altamirano, Marqu¨¦s de Urquijo y Rosales.En enero pasado, los vecinos de las fincas afectadas recogieron firmas para manifestar al Ayuntamiento su oposici¨®n al disco-bar. En el escrito, en el que se pide que "se desestime el proyecto", est¨¢n las firmas de la madre del alcalde, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, y del ex presidente del PP Antonio Hern¨¢ndez- Mancha, si bien este ¨²ltimo pidi¨® posteriormente al presidente del distrito que no tuviera en cuenta su r¨²brica pues hab¨ªa firmado sin conocer el proyecto.

Cumplir las ordenanzas

Luis Molina, que concedi¨® la licencia de obras en octubre de 1991, tiene que autorizar ahora el funcionamiento del local. Seg¨²n coment¨® ayer, la oposici¨®n de la madre del alcalde no va a condicionar la decisi¨®n final. "Si un establecimiento cumple las ordenanzas, no puede neg¨¢rsele la licencia para que desarrolle la actividad. Adem¨¢s, el alcalde me ha puesto aqu¨ª para hacer cumplir las ordenanzas, y estoy seguro que eso es lo que quiere que haga".El presidente de la asociaci¨®n de vecinos La Rosaleda de Arg¨¹elles, Joaqu¨ªn Parra, considera que la instalaci¨®n del local (que tiene licencia para ejercer como restaurante, cervecer¨ªa y disco-bar) "va a contribuir a que se deteriore m¨¢s la zona". "Adem¨¢s, el local necesita una salida de emergencia que los vecinos no van a autorizar", coment¨®.

El vocal socialista de la junta, Rafael Gonz¨¢lez, afirm¨® que no es problema de "ilegalidad", sino de "sensibilidad hacia un asunto al que se oponen 200 vecinos". "No se puede aprobar un proyecto que requiere la construcci¨®n de una chimenea de 32 metros en el patio de la casa y s¨®lo va a aportar ruido y molestias", explica.

Las comunidades de propietarios de la manzana afectada critican el proyecto porque "provocar¨¢ un caos circulatorio en una zona ya agobiada por quioscos y terrazas, perjudicar¨¢ la seguridad ciudadana de la zona e implicar¨ªa un deterioro ambiental".

Molina coment¨® que ha pedido informes a las ¨¢reas de Circulaci¨®n y Protecci¨®n Civil para que dictaminen el posible impacto del establecimiento antes de concender el permiso de funcionamiento.