Con la jeringuilla clavada
La muerte de dos drogadictos al d¨ªa por sobredosis, un hecho cotidiano
Mueren en la calle y a nadie le extra?a. Cada vez son m¨¢s. Son los toxic¨®manos. La ¨²ltima dosis -casi siempre de hero¨ªna- les arranca la vida en cualquier sitio. Con la muerte engrosan una estad¨ªstica an¨®nima y atrasada. El a?o pasado fueron 817 -m¨¢s de dos v¨ªctimas diarias-, y el anterior, 690, seg¨²n datos oficiales. Nadie sabe cu¨¢ntos van este a?o, pero Eduardo Mart¨ªn Garc¨ªa -identidad provisional de un joven que espera ser reclamado- es uno de ellos. Muri¨®, con la jeringuilla clavada, en el centro de Madrid.
Lunes 13 de abril. 20. 10. La Polic¨ªa Municipal llega a una plazoleta de la ruidosa avenida de Am¨¦rica. Est¨¢ repleta de coches. Los agentes se dirigen a uno de ellos. "?Coche bomba?" pregunta la periodista. "No. Un muerto", responde el polic¨ªa. "Persona fallecida, de unos 30 a?os, en el interior de un veh¨ªculo abandonado", informan en el parte. Un joven est¨¢ derrumbado en el asiento del Simca 1.000 blanco M-51-56-13T. Tiene una jeringuilla clavada en el brazo izquierdo. Lo cubren con una manta. "Parece una sobredosis", dice.20.19. Llega la ambulancia municipal del servicio Samur. El doctor Carlos Y¨¦benes busca el pulso sin encontrarlo: "Parada cardiorespiratoria por sobredosis de opi¨¢ceo [hero¨ªna]". "Debe de llevar una hora muerto", opina. Certifica la defunci¨®n. El cad¨¢ver queda tendido en el suelo y los corrillos se dispersan. Se desconoce la identidad del muerto.
"Hace tiempo que, el coche est¨¢ ah¨ª abandonado y con el aviso de retirada. Chicos j¨®venes, imagino que drogadictos, sol¨ªan meterse en ¨¦l y a veces dorm¨ªan", comenta una joven. Un cartero asiente. "Ves eso y no sabes si el que est¨¢ dentro duerme o est¨¢ muerto. ?Ay, cuando se lo digan a su madre!", tercia otra mujer.
21.20. Ya de noche, llega la juez de guardia, la del Juzgado de Instrucci¨®n 46. Ordena el levantamiento del cad¨¢ver. Los empleados lo hacen con guantes. Se abren las diligencias 1128 / 92.
21.52. El cuerpo llega al Instituto Anat¨®mico Forense. Los hechos se ponen en conocimiento de la comisar¨ªa de Chamart¨ªn. El juzgado de guardia se niega a informar sobre lo ocurrido.
Martes 14. "Desde las nueve de la ma?ana de ayer hasta las nueve de hoy nos han entrado diez cad¨¢veres. Aquel por el que pregunta est¨¢ sin identificar. Le est¨¢n haciendo la autopsia. A¨²n no ha venido la polic¨ªa a tomarle las huellas", informa el director del Anat¨®mico, Jos¨¦ Mar¨ªa Avenza. "Cada vez llegan m¨¢s muertes por droga", dice.
Mi¨¦rcoles 15. Los agentes de la polic¨ªa cient¨ªfica han realizado las "rese?as necrodactilares". Las huellas dicen que el cad¨¢ver se llama Eduardo Mart¨ªn Garc¨ªa, pero es un nombre provisional: hay que hacer m¨¢s comprobaciones. En el Anat¨®mico, ?Eduardo? sigue siendo "desconoc¨ªdo [ddo] n? 729". Aguarda en una de las 50 c¨¢maras frigor¨ªficas hasta que aparezca alguien que ratifique que ¨¦l es quien dicen que es. Tampoco se sabe a¨²n si ha muerto por drogas. "La sospecha de muerte por toxicoman¨ªa necesita confirmaciones anal¨ªticas", explica Avenza. Debido a las fiestas, no estar¨¢n listas antes del martes.
Jueves Santo. "El cad¨¢ver permanece como desconocido y eso hace suponer que el hombre no ten¨ªa mucha relaci¨®n con su familia. Eso es algo habitual en los drogadictos", afirma Carmen Torija, asistente social del Anat¨®mico. "Los familiares de muertos por drogas no suelen sufrir un shock tan fuerte ni tanta angustia como los que se enfrentan a una muerte repentina".
Viernes, s¨¢bado. Sin novedad.
Domingo de Resurrecci¨®n. Samur ha atendido en esta semana 16, sobredosis. ?Eduardo? es la ¨²nica v¨ªctima mortal.
Lunes 20. "Ya le hemos remitido todo al juez", informan en la comisar¨ªa. "El muerto sigue sin identificar. Si quiere usted informaci¨®n, tiene que personarse con abogado y procurador", responden en el juzgado.
Martes 21. "La identidad sigue siendo provisional, seg¨²n nos dice la polic¨ªa", explican en el Anat¨®mico. Ya tienen el resultado de la anal¨ªtica: El desconocido n¨²mero 729 ha muerto por drogas. Otro m¨¢s.
Mi¨¦rcoles 22. ?Eduardo?, sigue en una c¨¢mara frigor¨ªfica del Anat¨®mico. A¨²n no tiene identidad oficial. Nadie le reclama.
Son cosas que pasan.
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