Bush afirma que emplear¨¢ "toda la fuerza necesaria" para detener las revueltas
El presidente de Estados Unidos, George Bush, se dirigi¨® la noche del viernes (madrugada del s¨¢bado, hora peninsular espa?ola) a los norteamericanos en un intento de calmar a todas las partes implicadas en los disturbios de Los ?ngeles y en otras ciudades del pa¨ªs. Tras condenar a los que utilizan la violencia como excusa y asegurar que "se emplear¨ªa toda la fuerza necesaria" para detener las revueltas, el presidente se hizo eco del sentimiento de frustraci¨®n de la comunidad negra con el caso de Rodney King y prometi¨® que se har¨ªa justicia.
Bush hizo un llamamiento a todo el pa¨ªs a trav¨¦s de la televisi¨®n desde el despacho oval de la Casa Blanca. El presidente intent¨® calmar la inseguridad que los disturbios han provocado en la' mayor parte de la sociedad norteamericana, a la vez que se alineaba junto con los que se sienten insultados por la sentencia que declar¨® inocentes a los polic¨ªas que apalearon a Rodney King en Los ?ngeles el 3 de marzo de 1991."Visto desde fuera", dijo, "es dif¨ªcil comprender c¨®mo el veredicto puede encajar con el video". "Los representantes de los derechos civiles (los l¨ªderes de las comunidades negras) con los que me he entrevistado estaban aturdidos, al igual que yo, al igual que B¨¢rbara y que mis hijos", dijo. "Pero el veredicto del mi¨¦rcoles no es el fin del proceso" dijo Bush antes de explicar que el juicio va a ser revisado por un tribunal federal.
Con la misma energ¨ªa con la que asegur¨® que "se emplear¨¢ toda la fuerza necesaria para restaurar el orden", Bush conden¨® las actuaciones de las masas que han sembrado el terror en Los ?ngeles. "Lo que hemos visto", explic¨®, "no tiene nada que ver con la causa de igualdad que los norteamericanos deben defender. No ha sido un mensaje de protesta, sino la pura brutalidad de una muchedumbre".
Para Bush, las im¨¢genes de apedreamientos, saqueos e incendios que ha ofrecido la televisi¨®n han sido una terrible experiencia. "Nunca podremos olvidar lo que hemos presenciado en las ¨²ltimas 48 horas".
Bush tambi¨¦n dedic¨® algunas frases, en los 13 minutos de su discurso, a perfilar una emotiva visi¨®n sobre el trabajo de la polic¨ªa. "Yo respeto a nuestra polic¨ªa. Mantienen la paz y afrontan el peligro a diario. No ganan mucho dinero, pero cuidan a nuestra comunidad" explic¨®.
Bush oscilaba entre varias ideas: ofrecer confianza a los que quieren una respuesta agresiva contra la violencia, prometer seguridad a las minor¨ªas que se sienten ofendidas por el sistema y renovar la confianza en todos los s¨ªmbolos que representan a Estados Unidos.
Elecciones a la vista
Siete meses antes de las elecciones, en una ¨¦poca en la que la popularidad de Bush baja, la violencia que ha estallado en varias ciudades norteamericanas le coloca en una situaci¨®n dif¨ªcil. A pesar de que el principal candidato democr¨¢ta, Bill Clinton, ha declarado que no va a emplear las revueltas contra su oponente republicano, Bush tendr¨¢ que afrontar durante el resto de su campa?a los problemas de una sociedad impactada por el tr¨¢gico resurgir del conflicto racial.
La sociedad norteamericana se enfrenta a dos opciones: saber si la soluci¨®n est¨¢ en las propuestas dem¨®cratas de reforzar los derechos civiles, aumentar los presupuestos de educaci¨®n y dar oportunidades econ¨®micas a los pobres, o si la clave hay que buscarla en el mensaje republicano que propone aumentar la fuerza de la ley y el orden.
Los dem¨®cratas culpan a los recortes de presupuesto de los mandatos de Reagan y Bush de la situaci¨®n de conflictividad que se vive en los grandes centros urbanos, pero sus oponentes argumentan que fue el fracaso dem¨®crata en controlar los impuestos y los problemas raciales en la d¨¦cada de los 60, lo que precedi¨® a la hegemon¨ªa republicana.
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