Una impresionante demostraci¨®n de fuerza devuelve la calma a las calles de Los ?ngeles

La impresionante demostraci¨®n de fuerza desplegada en las calles de Los ?ngeles y el llamamiento a la calma hecho por Rodney King, la v¨ªctima del caso de brutalidad policial que desencaden¨® esta crisis, devolvieron ayer la paz a esta ciudad californiana, muchas de cuyas calles son hoy una r¨¦plica casi exacta de la situaci¨®n en que se encontraba Panam¨¢ tras la invasi¨®n norteamericana en diciembre de 1989.

En la noche del viernes se registraron, sin embargo, algunos actos de violencia aislados que elevaron el n¨²mero de muertos a 44 y convirtieron estos sucesos en los m¨¢s destructivos desde el punto de vista econ¨®mico de toda la historia de Estados Unidos.Soldados de la Guardia Nacional apostados en las esquinas m¨¢s conflictivas, parapetados tras los autom¨®viles volcados y protegidos por los muros incendiados de los edificios del sur de la ciudad fueron ayer la imagen m¨¢s com¨²n en esta enorme urbe. M¨¢s de 6.000 elementos d¨¦ esa fuerza militar, armados con fusiles autom¨¢ticos y vestidos con uniforme de combate, participan en la labor de auxilio de las unidades de polic¨ªa, que suman cerca de 10.000 efectivos: 5.000 de la polic¨ªa de Los ?ngeles, 1.390 miembros de la Polic¨ªa del Sherif del Condado, 2.300 efectivos de las Patrullas de Tr¨¢fico y un millar de polic¨ªas federales.

A pocos kil¨®metros del centro de Los Angeles, 1.500 marines y otros 3.000 soldados del Ej¨¦rcito regular esperan ¨®rdenes para sumarse a las fuerzas que vigilan la ciudad. Es posible que no sea necesaria la intervenci¨®n directa de los marines, pero los residentes de algunas ¨¢reas de Los ?ngeles se quejan de que, cuando los soldados de la Guardia Nacional dejan ciertas calles, vuelven a ellas los saqueadores y los delincuentes. "Aqu¨ª no nos pueden dejar ¨²nicamente protegidos por la polic¨ªa. Las bandas est¨¢n esperando la oportunidad para volver a atacar`, afirmaba la due?a de una tienda de alimentaci¨®n en la avenida Martin Luther King.

Desconfiado de la calma que se ha impuesto a estas horas, el alcalde de Los ?ngeles, Tom Bradley, declar¨®: "Yo no me voy a relajar. Yo no creo que todo se haya acabado. Lo que hemos hecho ha sido, mediante esta gran muestra de fuerza, dejar claro a la poblaci¨®n que estamos decididos a mantener el control".

Todav¨ªa bajo toque de queda y estado de emergencia -la Guardia Nacional lleg¨® a recorrer una por una las tiendas, las cafeter¨ªas y los restaurantes para asegurarse que cerraban antes de las cuatro de la tarde-, durante la noche del viernes se registraron, algunos enfrentamientos.

Una patrulla de polic¨ªa fue emboscada por la tarde en una calle del sur de Los ?ngeles por un grupo de negros armados con pistolas. Los agentes abrieron fuego y mataron a uno de los atacantes. El propietario blanco de una tienda en la zona central muri¨® por la noche al tratar de proteger su propiedad.

La polic¨ªa ha informado de que la mayor¨ªa de los muertos desde que los sucesos se iniciaron, el pasado mi¨¦rcoles, son hombres negros y latinos entre los 18 y los 40 a?os. 11 de los muertos lo han sido a manos de las fuerzas de seguridad.