La escritora George Sand, desmitificada en una biograf¨ªa

Cuenta Jean Chalon que cuando empez¨® a escribir la biograf¨ªa de George Sand que Edhasa publica ahora en castellano, lo hizo con un prop¨®sito claro: luchar contra las leyendas que rodean a una autora que escandaliz¨® a la sociedad francesa del siglo XIX. Chalon desmitifica en su libro los amores de George Sand con Alfred de Musset en Venecia y con Federico Chopin en Mallorca y muestra a una escritora que est¨¢ muy lejos de la imagen de marimacho que fumaba puros que nos ha dejado la leyenda.

"Se han escrito centenares de libros sobre los llamados amantes de Venecia, George Sand y Alfred de Musset", comenta Jean Chalon, "pero lo cierto es que llegaron a Venecia el d¨ªa 1 de enero de 1834, visitaron la ciudad al d¨ªa siguiente y el d¨ªa 3 cogieron una diarrea que les dur¨® semanas... Ella misma explica en sus cartas que est¨¢ enferma y que tiene miedo de que sus amigos de Par¨ªs se r¨ªan cuando conozcan el estado f¨ªsico en que se encuentra".Para escribir George Sand. Una biograf¨ªa, Chalon ha utilizado b¨¢sicamente los 24 vol¨²menes de la correspondencia de la autora, publicada por primera vez en los a?os sesenta, y los dos vol¨²menes de las Oeuvres autobiografiques.

El acceso a estas fuentes ha permitido al autor desvincularse de las biograf¨ªas anteriores de la Sand, en especial de la de Andr¨¦ Maurois, publicada en 1948.

Demasiadas leyendas

"Alrededor de George Sand hay demasiadas leyendas que deforman al personaje", afirma Jean Chalon. En la biograf¨ªa, el autor utiliza un criterio cronol¨®gico, por medio de cap¨ªtulos cortos, para escribir sobre un personaje nacido como Aurore Dupin en 1804 y que muri¨® habiendo hecho famoso el seud¨®nimo George Sand en 1876.Otra leyenda que Chalon desmonta en su, libro es la de Federico Chopin y George Sand en Mallorca. "Cuando George Sand vuelve de Valldemossa", explica, "dice que regresa de Mallorca con tres ni?os y que el m¨¢s pesado de los tres es Chopin". Chalon a?ade que los cuatro dorm¨ªan en la misma habitaci¨®n de la cartuja y que, dado lo p¨²dica que era la escritora, est¨¢ seguro de que no hubo relaci¨®n ¨ªntima entre ambos artistas, en contra de lo que siempre se hab¨ªa cre¨ªdo.

Otra leyenda que se derrumba es la visi¨®n de George Sand como un marimacho que fumaba puros sin cesar. El autor la desmiente afirmando que media 1,58 metros, ten¨ªa unos ojos maravillosos y que en realidad no fumaba puros, sino cigarrillos vulgares y corrientes.

"Es cierto que abandon¨® a su marido, lo que no era frecuente en el siglo XIX", concede Jean Chalon como casi ¨²nico gesto transgresor de la escritora, "y que tuvo siempre una actitud muy moderna, ya que siempre quiso mantener a los hombres a los que amaba, pero el aut¨¦ntico esc¨¢ndalo de George Sand fue que era una baronesa que trabajaba y se ufanaba de trabajar".

"Todos los amores de George Sand se sab¨ªan enseguida porque era una mujer c¨¦lebre en su ¨¦poca", se?ala Chalon. Entre ¨¦stos figuran los ya citados Musset y Chopin, un fracasado idilio con Prosper Merim¨¦e y una relaci¨®n de amistad con Gustave Flaubert.

Intimidad

"Es seguro que la escritora George Sand no tuvo una relaci¨®n ¨ªntima con dos hombres, Gustave Flaubert y Alexandre Dumas hijo", apunta el autor de la biograf¨ªa, "aunque les aconsej¨® y los consider¨® como hijos suyos". La cosa no pas¨® de una relaci¨®n puramente amistosa.En cuanto a la obra de George Sand, Jean Chalon considera que hoy en d¨ªa es dif¨ªcil de leer. "En una carta a Flaubert", cuenta, "ella misma dec¨ªa que mientras ¨¦l escrib¨ªa para la posteridad, ella lo hac¨ªa para el a?o". El escritor franc¨¦s salva, de todos modos, su correspondencia y la califica en este apartado como "la madame de Sevign¨¦ del siglo XIX".