"No he abandonado a mi madre"

"No he abandonado a mi madre; quien lo diga miente", enfatiza Carmen Plata. La direcci¨®n del hospital Ram¨®n y Cajal (el Piramid¨®n) la ha llevado al juzgado de guardia por el presunto abandono de su madre, Lorenza, una anciana que pasa de los 80 a?os y cuya decrepitud le impide hoy articular palabra alguna."Mi madre sufre demencia senil desde hace varios meses. La llev¨¦ al hospital muy enferma, pero se negaron a internarla; por eso me march¨¦ de all¨ª sin decir nada", evoca Carmen Plata. "Me han hecho mucho da?o al decir que la dej¨¦ abandonada; eso no es cierto: s¨®lo quer¨ªa que la trataran adecuadamente".

La denuncia del Ram¨®n y Cajal se fundamenta, entre otros argumentos, en que Carmen Plata, separada de su marido -"me dej¨®, a m¨ª y a mis hijos, para irse con otra mujer"-, abandon¨® a su madre en las urgencias del centro consciente de que no necesitaba ser ingresada y de que se le iba a dar el alta m¨¦dica.

Se march¨®, adem¨¢s, "sin decir nada, dejando un tel¨¦fono y un domicilio falsos", seg¨²n ha de clarado Teresa, asistente social del centro. "Efectu¨¦ varias llamadas al tel¨¦fono que hab¨ªa de jado y en todas las ocasiones contest¨® una persona que no conoc¨ªa a Teresa ni sab¨ªa de qui¨¦n le hablaba. El se?or se ofreci¨® incluso a hacer algunas gestiones por el barrio para localizar a los familiares de la anciana", matiz¨® Teresa.

Enfado

El enfado del equipo m¨¦dico de urgencias que atendi¨® a Lorenza fue todav¨ªa mayor al sospechar que Carmen Plata se hab¨ªa ido de vacaciones dejando all¨ª a la anciana. El supuesto abandono ocurri¨® el pasado d¨ªa 3 de julio, fecha que eligieron miles de madrile?os para empezar sus vacaciones estivales."Cuando llegan las vacaciones, son decenas las familias que dejan a sus ancianos en el servicio de urgencias y se van sin decir nada", comenta un m¨¦dico que habitualmente trabaja en dicho servicio en un gran hospital. "Como ver¨¢, estoy en Madrid y no me he ido de vacaciones", razona Carmen Plata a este peri¨®dico. Y a?ade: "Lo del tel¨¦fono y el domicilio falsos, tambi¨¦n es una calumnia, y tengo pruebas". Carmen insiste en que los m¨¦dicos del Piramid¨®n mienten: "No presento una denuncia en el juzgado porque siempre el pez grande se come al chico, ?sabe usted?".

?A qu¨¦ atribuye, pues, la denuncia por abandono que ha presentado el hospital contra usted? "No lo s¨¦. Ellos saben que no era la primera vez que llevaba all¨ª a mi madre para que la atendieran. Su demencia senil se apoder¨® de ella hace varios meses".

Carmen Plata justifica su marcha del hospital: "Si ese d¨ªa me fui sin decir nada era porque se negaban a internarla, a pesar de que estaba enferma. Pero quiero aclarar que ni me desentend¨ª de su problema cl¨ªnico ni perd¨ª el contacto con ella; al contrario, despu¨¦s telefone¨¦ varias veces al Ram¨®n y Cajal, haci¨¦ndome pasar por su sobrina, para ver qu¨¦ hab¨ªan hecho con ella".

La patolog¨ªa de Lorenza, argument¨® el hospital a Carmen Plata para darle el alta, se pod¨ªa cuidar en su domicilio con un tratamiento adecuado.

En vista de que ning¨²n familiar atendi¨® las llamadas de megafon¨ªa para que se hiciera cargo de la anciana, los m¨¦dicos de urgencias del Piramid¨®n le buscaron un hueco y una cama en el servicio y la dejaron all¨ª hospitalizada hasta que el juez se pronunciara al respecto.

Ese d¨ªa, como la mayor¨ªa de los del a?o, el Piramid¨®n estaba hipersaturado de enfermos y result¨® imposible buscarle a ella sola una habitaci¨®n. "Aunque se le prest¨® la misma atenci¨®n que a cualquier otro paciente". D¨ªas despu¨¦s, Lorenza fue trasladada, con permiso del juez, a la cl¨ªnica Sear, que es privada y con la que el Ram¨®n y Cajal tiene un concierto.