La 'Lun¨¢ de Babilonia' brilla en el ¨¦ter
Los homosexuales hacen su propio programa de radio en Onda Verde
Los lunes por la tarde, el caos empieza. Ya son casi las nueve, s¨®lo queda poco m¨¢s de una hora hasta que comience el programa, y nadie sabe d¨®nde se ha escondido la cinta con las cu?as y la sinton¨ªa. Adolfo cachea febrilmente la pila con los discos para hallar alguna sustituci¨®n, mientras Fran no puede ocuparse de estos problemas. Est¨¢ hojeando los peri¨®dicos en busca de noticias, porque a¨²n no tiene idea de lo que va a contar en los 60 minutos que dura la Luna, de Babil¨®nia, programa para homosexuales emitido por la radio pirata Onda Verde.
El estudio de la emisora est¨¢ situado en el s¨¦ptimo piso de una casa de viviendas del barrio de Atocha. Las agujas del reloj en el locutorio siguen acerc¨¢ndose a las diez, mientras Diego rellena las fichas de inscripci¨®n de la emisora. En el ¨²ltimo minuto corte al estudio, donde ya se ha sentado Adolfo, junto a una mesa con tres micr¨®fonos y un mont¨®n de papeles. Detr¨¢s de la ventana est¨¢ el control, peque?¨ªsimo, con un pupitre de mezclas, varios tocadiscos, magnet¨®fonos y otro miero.All¨ª se han puesto Fran y Jos¨¦ Antonio, que ya anuncia el programa. Los locutores, entretanto, todav¨ªa discuten si van a empezar con las ¨²ltimas noticias del ambiente homosexual o con los comentarios sobre el cierre municipal del centro del Colectivo Gai de Madrid, Cogam.
Pero cuando est¨¢n en el ¨¦ter, siempre tienen algo que contar: sobre pol¨ªtica, literatura, cine, o la vida privada. De esta manera hacen un programa muy espont¨¢neo, divertido y con mucha improvisaci¨®n. Adolfo empieza a criticar un comentario de un peri¨®dico, pero le interrumpe Jos¨¦ Antonio (con un criterio cada vez m¨¢s en desuso): "Hombre, antes de criticar hay que explicar de qu¨¦ informaci¨®n se trata, porque no todos nuestros oyentes conocen la historia". Y todo se emite en directo. Seg¨²n Diego, esto s¨®lo funciona porque los cuatro se conocen muy bien. "Cuando venga un nuevo miembro resultar¨¢ bastante dif¨ªcil para ¨¦l ser del equipo".
El contagio del sida
Los cuatro radio aficionados, que sacrifican su tiempo libre para la radio todos los lunes, son estudiantes -Fran se califica como "estudiante en paro", ya que acaba de terminar su carrera de Biol¨®gicas-. Tienen entre 25 y 28 a?os. Salvo Fran, que antes ha colaborado en radionovelas de Radio Nacional, nadie cuenta con experiencia en el sector.Para el programa han escogido una noticia de un peri¨®dico que les enfada mucho. La informaci¨®n explica que para contraer el sida hacen falta 500 relaciones sexuales con un portador del virus. "Es mentira, y adem¨¢s es peligroso publicar algo as¨ª", se rebela Jos¨¦ Antonio, "hay bastante gente que se ha contagiado y nunca ha tenido tantas relaciones sexuales". Al instante. se desata una discusi¨®n sobre el sexo seguro, ante los micr¨®fonos abiertos.
El nombre del programa se inspira, por un lado, en el deuna revista, La Luna de Madrid, y en el de la ciudad b¨ªblica como sin¨®nimo para una multitud de los deseos y pecados.
Los chicos toman muy en serio su tarea de abrir los ojos al p¨²blico de todo lo que se refiere a la vida homosexual, sobre las ofertas de ocio y la discriminaci¨®n en la sociedad y la prevenci¨®n del sida. Se enfrentan con los prejuicios en los medios heterosexuales y las noticias que consideren falsas.
Adolfo espera que pueda ayudar un poco a gente que se siente sola y no tiene nadie con qui¨¦n hablar: "Los oyentes escriben cartas y llaman por tel¨¦fono.
Llaman muchos que est¨¢n muy solos, que est¨¢n deprimidos, no conocen a otros chicos gais, y te deja un buen recuerdo que t¨² les hayas hecho compa?¨ªa con las cosas que les cuentas para que se sientan menos solos. Para esta gente supongo que nosotros debemos ser como su secreto o el bast¨®n de agarrarse".
Para Adolfo, la participaci¨®n en la radio es una de varias actividades en los grupos homosexuales. Como los dem¨¢s, Adolfo es miembro de Cogam.
Y a trav¨¦s de la radio invita a sus oyentes a tomar parte en la ocupaci¨®n del centro, en la calle de Carretas, 24 horas al d¨ªa para impedir el cierre ordenado por el concejal del distrito, ?ngel Matanzo. Y para terminar el programa deciden protestar envi¨¢ndole un beso colectivo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.