Benito Floro cuestiona el futuro de Ricardo Rocha en el Real Madrid

Ricardo Rocha., futbolista brasile?o del Real Madrid, no'tiene claro su futuro. Benito Floro, el nuevo entrenador del equipo,afirm¨® ayer que su continuidad depende de] informe de la comisi¨®n deportiva. Su contrato concluye en junio de 1993, pero Ram¨®n Mendoza, el presidente, se comprometi¨® la pasada temporada a merjorarlo y ampliarlo en dos a?os. Sin embargo, con el cambio de t¨¦cnico todo es diferente: Rocha debe demostrar a¨²n su val¨ªa.Cuando se anunci¨® el fichaje de Floro por el Madrid ya se comenz¨® a especular sobre el futuro de Rocha. Su primer a?o en el conjunto blanco fue digno, pero con un sistema defensivo individual. Floro quiere implantar el marcaje por zonas y en ese aspecto la efectividad deRocha, pese a que ya jug¨® de esa forma en Brasil, es una inc¨®gnita.

Por eso, la promesa de Mendoza de ampliar y mejorar su contrato ya no vale. "No hay malentendidos", coment¨® ayer Floro. "Rocha ya sabe", a?adi¨¦, "los pasos que se van a seguir en su case). Depende del an¨¢lisis que haga de su rendimiento la comisi¨®n deportiva [el presidente; el gerente, Manuel Fern¨¢ndez Trigo; el director t¨¦cnico y entrenador, el propio Floro, y, el responsable de las categor¨ªas inferiores, Vicente del Bosque]".

El jugador, en declaraciones al diario deportivo Marca publicadas ayer, se mostr¨® decepcionado por el modo en que el club se comporta con 61 desde su regreso de las vacaciones: "Estoy triste y aburrido. Quiero hablar de mi situaci¨®n y a¨²n no he podido. Siento que no hay una recompensa al trabajo que he realizado. Creo que no merec¨ªa este trato".

Adaptaci¨®n supuesta

Otros jugadores, en cambio, no tienen que demostrar que sirven para la zona. Se presupone que s¨ª. Es el caso de Sanchis, crIticado la pasada temporada y con el que Rocha ha confesado sentirse incompatible, pero en el que Floro tiene puestas muchas esperanzas, aunque no como central, sino como defensa derecho.

El Madrid cumpli¨® ayer su quinto d¨ªa de preparaci¨®n y Floro se mostr¨® conforme con el comportamiento de sus jugadores durante ese periodo. "Estoy satisfecho", dijo, "por su gran predisposici¨®n al trabajo. Se est¨¢n tomando los cambios con gran naturalidad. La preparaci¨®n va de menos a m¨¢s en todos los conceptos f¨ªsico-t¨¦cnicos y la asimilaci¨®n es francamente positiva".

Benito Floro no cree que su plantilla tarde en adaptarse plenamente a su sistema. "A nivel colectivo", afirm¨®, "no es d¨ªficil. En un 70% estar¨¢ asimilado, en breve. El 30% restante ya depende individualmente de cada, jugador. El desarrollo pr¨¢ctico de mis ideas les puede costar a unos m¨¢s que a otros". Lasa, Alfonso y Luis Enrique., ausentes por encontrarse disputando los Juegos Ol¨ªmpicos con la selecci¨®n espa?ola, tardar¨¢n m¨¢s tiempo. El t¨¦cnico conf¨ªa, no obstante, en acelerar su adaptaci¨®n con un trabajo espec¨ªfico.

Floro reconoci¨® que, cuando fich¨®, ya ten¨ªa casi perfilado el once inicial: "Lo contrario ser¨ªa muy triste. En un equipo hay 20 jugadores con derecho a jugar y un m¨ªnimo de cinco con el deber de estar siempre en forma para hacerlo".

El entrenador madridista coment¨® tambi¨¦n su idea sobre la exigencia del club de ofrecer, adem¨¢s de victorias, espect¨¢culo. "Se trata", indic¨®, "de jugar bien. Es decir, pasar bien el bal¨®n y ganar. Esto se puede conseguir individualmente, con tres jugadores que arrastren al equipo, o colectivamente. Mi apuesta es esta ¨²ltima: pasarse colectivamente bien el bal¨®n y ganar. Ninguna de las dos premisas aisladas basta".

Por otro lado, tanto Buyo como Maqueda evolucionan satisfactoriamente de sus lesiones. Los problemas de Zamorano, obligado a visitar el pod¨®logo por tener los pies cabos, no le preocupan a Floro: "Se le agarrotan los dedos y siente molestias al pisar, pero se le pondr¨¢n unas plantillas correctoras y se solucionar¨¢ todo".