Mija¨ªl recorre Lanzarote a paso ligero

Un Mija¨ªl Gorbachov deportivo, en mangas de camisa y con zapatillas de deporte, pantal¨®n corto y una gorra, rompi¨® a ¨²ltima hora de la tarde de ayer su retiro en la residencia La Mareta , en Teguise (Lanzarote), donde pasa sus vacaciones junto a su esposa Ra¨ªsa desde el mi¨¦rcoles. Decidido y a paso ligero, emprendi¨® una inesperada marcha de ocho kil¨®metros, en la que invirti¨® una hora y media. El ex presidente sovi¨¦tico consigui¨® agotar a quienes le acompa?aban.Ra¨ªsa, con una camiseta y pantalones el¨¢sticos, estuvo a la altura de las circunstancias, sin duda habituada a esta clase de paseos incontenibles de su esposo. Vista la demostraci¨®n de ayer puede decirse que el ex presidente sovi¨¦tico, a sus 60 a?os, guarda una espl¨¦ndida forma f¨ªsica.

"Esto es lo que m¨¢s le gusta: caminar. Y nadar. Ambas cosas las hace muy a menudo", comentaba, sin perder el paso, WIadimir Persov, int¨¦rprete e ¨ªntimo de Gorbachov.

Ra¨ªsa suele responder con gracias" a las muestras de simpat¨ªa de las gentes y Gorbachov, que no habla ingl¨¦s ni espa?ol, ha aprendido una palabra: "Adelante". Ayer la utiliz¨® para animar a sus compa?eros de marcha hasta el final.

En el largo recorrido a pie por la costa de la isla, los vecinos y los turistas extranjeros, que ahora llenan los hoteles de Teguise se cruzaban por sorpresa con el hombre m¨¢s populardel siglo. Los m¨¢s afortunados obtuvieron fotos o filmaron en v¨ªdeo al matrimonio.

Gorbachov no puso reparos a los fot¨®grafos profesionales y espont¨¢neos. Siempre avanz¨® mirando de frente, con estilo de marchador casi ol¨ªmpico, controlando el tiempo con su reloj. Apenas abri¨® la boca para hacer alg¨²n comentario a Ra¨ªsa sobre el paisaje volc¨¢nico y las playas o para reclamar la presencia a su lado de un sufrido Wladimir, algo rezagado por culpa de los periodistas y de la falta de entrenamiento.

Son las primeras vacaciones del matrimonio tras el golpe de Estado. que sacudi¨® Mosc¨² en agosto de 1991. Permanecer¨¢n en la isla hasta el jueves 10.

El d¨ªa de su llegada, el matrimonio se acost¨® a medianoche y descans¨® hasta las 10 de la ma?ana. Tres horas despu¨¦s, ¨¦l, en ba?ador y con la gorra que protege del sol la mancha de su cabeza, y ella en biquini se ba?aron en la piscina de La Mareta y pasearon por la playa.

Gorbachov tan s¨®lo detuvo ayer su paso decidido para quitarse una piedra de la zapatilla. o cuando Ra¨ªsa, que jugaba con sus manos para sujetarse el sombrero de paja amenazado por el viento, quiso hacerse una foto de recuerdo junto a un ciclista con el torso desnudo. El fot¨®grafo fue el m¨¦dico Igori Borisov, que acompa?a al matrimonio. Ra¨ªsa y Qorbachov hicieron otros dos altos en el camino: para visitar una tienda de ropas y para comprobar en un cartel de la calle el cambio de divisas del d¨ªa.