Theo Waigel fustiga a quienes evocan el 'fantasma alem¨¢n'

El ministro de Finanzas alem¨¢n, Theo Waigel, realiz¨® ayer un duro alegato contra quienes agitan el espantajo de un supuesto peligro alem¨¢n para argumentar en favor de la unidad de Europa. La declaraci¨®n, en conferencia de prensa, se produjo en el edificio que alberga al Parlamento Europeo (PE) en Estrasburgo, precisamente el d¨ªa en que esta. instituci¨®n celebraba su 40 aniversario, y respondiendo a una invitaci¨®n de los diputados de su partido. Las palabras de Waigel sustrajeron protagonismo al PE y al presidente de la Comisi¨®n Europea, Jacques Delors, que pronunci¨® un discurso abogando por la profundizaci¨®n de la democracia en las instituciones europeas."No puedo comprender el miedo a Alemania que algunos esgrimen en la campa?a francesa", afirm¨® el ministro. "Estas afirmaciones no son compatibles con la actitud amistosa y leal de Alemania y con su papel en las instituciones europeas e internacionales como la OTAN y la CE", a?adi¨®.

- La intervenci¨®n del ministro alem¨¢n estuvo dedicada en su mayor parte a explicar las medidas de recorte de los tipos de inter¨¦s por parte del Bundesbank, hecho que se neg¨® a relacionar con el miedo a Alemania y al refer¨¦ndum franc¨¦s. "Estas teor¨ªas est¨¢n llevando las cosas demasiado lejos", advirti¨®. Waigel no quiso especular sobre el refer¨¦ndum. No ocult¨® que Alemania espera toda la solidaridad de los socios europeos para resolver algunos de sus problemas: "Hay desaf¨ªos, como las cuestiones medio ambientales o el flujo enorme de refugiados que recibe y acoge Alemania, que s¨®lo tienen respuesta en una uni¨®n europea".

Mayor cooperaci¨®n

Por la ma?ana, Delors propugn¨® por una mayor cooperaci¨®n entre las instituciones. Delors sostuvo la necesidad de colaboraci¨®n con los Parlamentos nacionales y afirm¨® la teor¨ªa de una doble soberan¨ªa europea, la que se expresa en el PE y en el Consejo Europeo como ¨®rgano que recoge la legitimidad de los Parlamentos nacionales y de los Gobiernos.

El cumplea?os del PE no se celebr¨® de forma deslucida, pero s¨ª inquietante bajo las sombras del refer¨¦ndum franc¨¦s y con los achaques que aquejan a la mala salud de esta instituci¨®n desde su fundaci¨®n hace 40 a?os, y que ahora aparecen perfectamente visibles y en primer plano: hemiciclos vac¨ªos, eterna querella entre Bruselas y Estrasburgo sobre la sede definitiva, escasa popularidad, exceso de burocracia y una eterna actitud adolescente en la revindicaci¨®n de mayores poderes. Todo esto tiene su soluci¨®n en Maastricht, seg¨²n Delors, que termin¨® su discurso con un canto a la participaci¨®n: "0 Europa es cada vez m¨¢s democr¨¢tica y animada por ciudadanos conscientes de su pertenencia no s¨®lo a sus patrias sino tambi¨¦n a una aventura colectiva, o Europa no ser¨¢".