Los euroesc¨¦pticos brit¨¢nicos arrecian sus ataques contra la Uni¨®n Europea
El tratado de Maastricht podr¨ªa ser la m¨¢s importante v¨ªctima de la crisis pol¨ªtica en el Reino Unido. La tormenta monetaria europea puso en una situaci¨®n muy desairada al Gobierno de John Major, forzado a romper su firme promesa de no devaluar. La primera reacci¨®n de Downing Street fue culpar al Bundesbank alem¨¢n de las desventuras de la libra esterlina. Las acusaciones contra las autoridades financieras alemanas parec¨ªan partir del propio Major, y fueron coreadas ayer por una fortalecida legi¨®n de euroesc¨¦pticos, que arreci¨® sus ataques contra los tratados para la Uni¨®n Europea. Aunque el Partido Conservador cerr¨® filas en torno a Major, algunos diputados hasta ahora favorables a Maastricht expresaron sus dudas sobre la oportunidad de seguir adelante con el proceso de aprobaci¨®n.
El anuncio de que la libra reingresar¨ªa, llegado el momento, en el Sistema Monetario Europeo (SME) no consigui¨® atenuar el nuevo clima de desconfianza brit¨¢nica hacia Alemania ni la creciente impresi¨®n de que el Parlamento de Westminster rechazar¨ªa Maastricht aunque los franceses dijeran s¨ª y la ley de aprobaci¨®n llegara a la C¨¢mara de los Comunes.
Ego¨ªsmo
Major hab¨ªa basado todo su programa pol¨ªtico en las virtudes antiinflacionistas del SME y en la necesidad de estrechar la unidad europea. El primero de los ejes se ha roto a causa del ego¨ªsmo alem¨¢n, seg¨²n el punto de vista de Downing Street, y eso debilita la confianza en el segundo.
Los euroesc¨¦pticos de ambos bandos, conservadores y laboristas, celebraban ayer lo que Alan Walters, antiguo gur¨² econ¨®mico de Margaret Thatcher, llam¨® "el fin del SME y de la Uni¨®n Europea y el retorno forzoso a pol¨ªticas sensatas". En el entorno de la ex primera ministra se brind¨® con champ¨¢n el mi¨¦rcoles por la noche. La ex l¨ªder tory guardar¨¢ silencio hasta ma?ana, d¨ªa en que pronunciar¨¢ una conferencia en Washington en la que lanzar¨¢ su m¨¢s furibundo ataque contra Maastricht y el SME.
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