Del buen morir

RELATOS Como el ofrecido hoy en EL PA?S por un enfermo en fase terminal, y que fue escrito algunos d¨ªas antes de su muerte, ayudan a comprender los complejos problemas que se le plantean al ser humano en las situaciones l¨ªmite de su vida. ?C¨®mo no mostrarse de acuerdo, a su luz, sobre la necesidad de que los enfermos en esas condiciones dispongan de un mayor reconocimiento de derechos tan elementales como el de morir dignamente y el de disponer de una informaci¨®n veraz sobre el proceso de su enfermedad?La controversia -ideol¨®gica, legal y moral m¨¢s que cient¨ªfica- que existe sobre estos problemas se revela, cuando se conocen relatos como el publicado, en gran medida artificiosa. Suelen traerse a colaci¨®n argumentos pretendidamente objetivos -la ciencia, el ordenamiento jur¨ªdico, el sistema sanitario, etc¨¦tera-, pero en realidad s¨®lo encubren a veces prejuicios personales y consideraciones cient¨ªficas que de ning¨²n modo lo son de acuerdo con la ciencia actual. Con ello se impone a la persona, en el momento en que se encuentra m¨¢s inerme e indefensa, el m¨¢s sutil de los totalitarismos: el que violenta su voluntad en el altar de normas y principios que la historia y la cultura han demostrado cambiantes.

"Con estas l¨ªneas pretendo que situaciones como las que yo he sufrido desaparezcan y no se lesionen los derechos del enfermo, eligiendo el individuo morir con la dignidad necesaria. Si lo consigo, mi esfuerzo no habr¨¢ sido est¨¦ril", afirma el protagonista del relato. Su testimonio no ser¨¢ en balde. Constituir¨¢, sin duda, una aportaci¨®n valiosa a cuantos desde hace a?os luchan contra un sistema que, en ocasiones, responde justamente a lo que se ha venido en llamar encarnizamiento terap¨¦utico y reivindican el derecho a una muerte digna.