La vuelta de Magic al trabajo
El base inicia en Hawai la pretemporada con los Lakers
Magic Johnson, ya en forma como si estuviese a mitad de temporada, lleg¨® el martes con el tiempo justo para tomar el avi¨®n que le llevar¨ªa a la concentraci¨®n de pretemporada de Los ?ngeles, tras su decisi¨®n de volver a la competici¨®n pese a estar infectado del virus del sida. En los a?os ochenta, muchas veces, los pilotos paraban los motores y esperaban a un Johnson tard¨®n -Los Lakers nunca se marchar¨ªan sin ¨¦l-, por lo cual el martes fue la vuelta a la rutina el que Johnson llegara, s¨®lo 10 minutos antes de la salida.
Vestido con zapatillas de deporte, camiseta blanca y bermudas, Johnson se sumergi¨® en la cafeter¨ªa del aeropuerto. Una mujer le preguntaba, en la cola de la cafeter¨ªa: "?Puedo tocarle el brazo? Le voy a decir a mi hermana que le he tocado". Los miembros de un equipo australiano de esgrima tambi¨¦n le paraban y uno de ellos le dijo: "Has hecho un buen trabajo en los Juegos Ol¨ªmpicos."
Johnson, despu¨¦s de echar un vistazo a su reloj, pidi¨® dos donuts ba?ados en miel.
"?Y si le pongo media docena?", le pregunta el encargado "Media docena para m¨ª, no" contesta Johnson.
Su cuerpo est¨¢ como esculpido, y parece estar en buena forma, aunque la paliza empieza ahora. El vuelo hacia Honolul¨² es su primer compromiso oficial como jugador de los Lakers en activo; como ¨¦l, el director Jerry West, el locutor Chick Hearn y algunos jugadores veteranos y rookies se van 10 d¨ªas a una con centraci¨®n en Hawai que empezar¨¢ el viernes por la ma?ana.
"En principio iba a viajar el lunes a Maui porque hab¨ªa con seguido una plaza all¨ª", comenta Johnson. "Pero decid¨ª viajar con los chicos para volver a sentir el esp¨ªritu de equipo".
Infectado por el HIV, el virus causante del sida, Johnson abandon¨® la National Basketball Association (NBA) hace exactamente once meses. Pero aqu¨ª est¨¢; su mujer, Cookie, le ha echado de casa para que trabaje.
"Mi mujer me ha dicho que est¨¢ cansada de viajar, ese es el motivo de que no me acompa?e", afirma. "Ha venido a todas partes. Hawai, Europa, no nos hemos estado quietos."
Como se considera que Johnson es el primer jugador de la NBA infectado por el sida, el preparador Gary Vitti, que se ha informado sobre la enfermedad y ha hablado con los m¨¦dicos de Johnson, vigilar¨¢ estrechamente al base del equipo.
"Una de las cosas que no queremos hacer con Johnson es presionarle hasta el agotamiento", dice Vitty. "Jugar¨¢ unos 50 o 60 partidos, puede estar en perfectas condiciones, pero toda la situaci¨®n puede cambiar. Quiero decir que si su cuerpo no reacciona bien, tendr¨ªa que reconsiderar lo que est¨¢ haciendo. Pero, con un programa limitado para Earvin, podremos verle al m¨¢s alto nivel de su juego cada noche."
Los miembros del equipo aseguran que no, piensan mimar a Johnson durante la concentraci¨®n. "Es lo mejor" afirma el alero A. C. Green, dando un golpe en los ri?ones a Johnson, que se r¨ªe y dice, "claro que entrenar¨¦ duro. He vuelto para prepararme y estar en forma. Pero hombre, si durante el tiempo que estado fuera he levantado pesas y he estado corriendo igual que lo hac¨ªa cada d¨ªa antes del ¨²ltimo All Star Game."
El resto de Los Lakers, que raramente han dejado que la fama o la enfermedad de Johnson les perturbase, tampoco se sienten resentidos por el nuevo contrato de Johnson: 14,6 millones de d¨®lares (146 millones de pesetas) por una ampliaci¨®n de un a?o, cifra que le convierte en el deportista, mejor pagado del planeta.
"Una vez conseguido, ya no tiene importancia", afirma Johnson sobre su contrato. "Antes, el equipo no quer¨ªa hacerlo, o deber¨ªa decir que no pod¨ªa, debido a las normas de la NBA. Pero no, voy a hacer que el bardo se tambalee, porque amo jugar y . no hay razones para crear problemas al equipo por querer cobrar m¨¢s".
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