IRPF: de razones y de cerrazones
Considera el articulista que la descentralizaci¨®n fiscal es ventajosa por diversos motivos pero, sobre todo, porque refuerza la consolidaci¨®n del estado de las autonom¨ªas. Apuesta decididamente por el modelo alem¨¢n, muy descentralizado, frente al criterio italiano, centralista e insolidario.
Sosiega el ¨¢nimo comprobar que puede expresarse de manera serena y relajada la discusi¨®n. en torno a la corresponsabilidad fisccal auton¨®mica. Buena muestra de ello son las reflexiones por escrito del se?or Rodr¨ªguez Ibarra. Bien diferentes, en su forma, a la demagogia y barriobajer¨ªa a que parec¨ªa condenado el asunto, propicias a avivar los rescoldos del enfrentamiento interterritorial. Precisamente en un momento en que, mejor que nunca en la historia reciente (y la no tan reciente), los distintos pueblos de Espa?a conviven en armon¨ªa y desde el rec¨ªproco respecto y comprensi¨®n.En IRPF. mis razones, el se?or Rodr¨ªguez Ibarra expone ocho motivos contra la cesi¨®n del IRPF a las comunidades aut¨®nomas. A continuaci¨®n me propongo mostrar la incorrecci¨®n de sus planteamientos. Por contra, sostengo la bondad de la corresponsabilidad fiscal. Para mejorar el sistema de financiaci¨®n auton¨®mica. Y tambi¨¦n para el ¨®ptimo funcionamiento del sistema pol¨ªtico.
Un malentendido
Sorprende la concepci¨®n tecnocr¨¢tica y funcional que el se?or Rodr¨ªguez Ibarra muestra de la actuaci¨®n pol¨ªtica de los responsables institucionales. Para el responsable pol¨ªtico, la necesidad de modificar una ley no deber¨ªa ser un obst¨¢culo insalvable para adoptar una medida. Como en 1990 cuando se reform¨® la Ley del Fondo de Compensaci¨®n Interterritorial (FCI).
Pero no es necesario modificar la LOFCA. Los primeros motivos del se?or Rodr¨ªguez Ibarra se sustentan en un malentendido. S¨®lo en IRPF.- mis razones se emplea el t¨¦rmino cesi¨®n del IRPF. Por el contrario, habitualmente se emplea el t¨¦rmino participaci¨®n en el IRPF. La diferencia, aunque terminol¨®gica, no es trivial.
La LOFCA (art¨ªculo 13.1) establece que Ias comunidades aut¨®nomas dispondr¨¢n de un porcentaje de participaci¨®n en la recaudaci¨®n de los impuestos estatales no cedidos...,". En el sistema vigente, la participaci¨®n es sobre el conjunto de los ingresos del Estado. Pero nada obsta para que ¨¦sta se establezcca sobre la recaudaci¨®n territorializada del IRPF. En consecuencia, la participaci¨®n auton¨®mica en el IRPF no queda fuera ni de la LOFCA ni del acuerdo del Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera.
Pero, lo que deber¨ªa ser incluso m¨¢s relevante para un responsable institucional del PSOE: 1. Se enmarca perfectamente en las reflexiones del Programa 2000, en cuando permite mayor autonom¨ªa tributaria sin modificar el marco constitucional. 2. No contraviene las resoluciones del ¨²ltimo congreso federal del PSOE. Y lo que es definitivo. 3. Da mejor cumplimiento al compromiso electoral del PSOE con la sociedad espa?ola. Su programa electoral de 1989 propone que la disponibilidad de los recursos auton¨®micos "... guarde estrecha relaci¨®n con la evoluci¨®n que sigan los ingresos tributarios del Estado...". Por el contrario, hasta ahora la disponibilidad de los re cursos auton¨®micos ha venido asociada sistem¨¢ticamente a la evoluci¨®n del gasto del Estado. En lo que se refiere a la gesti¨®n tributaria y a la percepci¨®n ciudadana (motivo 3) se tratar¨ªa, de integrar a las autonom¨ªas en las tareas de la Agencia Estatal Tributaria, lo. que, dicho sea de paso, ser¨ªa un avance sustancial para mejorar la coordinaci¨®n de las diferentes pol¨ªticas presupuestarias.
Por otra parte, no se puede despreciar el efecto sobre la percepci¨®n ciudadana de medidas tan sencillas como explicitar ya en los impresos del IRPF la cantidad que va a cada Administraci¨®n, en una sociedad en la que la conciencia fiscal ha crecido apreciablemente. Por no hablar de la percepci¨®n ciudadana acerca de una eventual discusi¨®n presupuestaria auton¨®mica, donde se debatiera un recargo (o descargo) en su participaci¨®n en el IRPF. Pero gobernar as¨ª quiz¨¢ sea m¨¢s dif¨ªcil.
Obst¨¢culo insalvable
La diferencia en la evoluci¨®n de las recaudaciones territoriales del IRPF se opone como obst¨¢culo insalvable por sus efectos contrarios a las comunidades aut¨®nomas de menor renta (motivo 4). Se dice incluso que "no hay nada en el horizonte que indique que en los pr¨®ximos a?os esa tendencia vaya a quebrarse.
Pero existen al menos dos buenos motivos para creer que va a ser as¨ª: 1. La diferente evoluci¨®n se debe al aumento de la presi¨®n fiscal directa en los ochenta. Pero el Plan de Convergenc¨ªa, pieza maestra de la pol¨ªtica econ¨®mica del Gobierno, pos tula la congelaci¨®n de la presi¨®n fiscal individual en las cotas al canzadas en 1993. Y 2. la reciente reforma del IRPF reduce tipos -medida aplazada transitoriamente- y trata m¨¢s favorable mente las plusval¨ªas. El menos cabo en la recaudaci¨®n se dejar¨¢ sentir m¨¢s en las regiones con mayor renta.
Respecto a la disgresi¨®n acerca de las diferencias interregionales en el fraude (motivo 5), pol¨¦mica personal entre dos presidentes auton¨®micos, no es un especto central en el debate. En todo caso, cabe afirmar que el fraude lo realizan individuos y no regiones. Y es obligaci¨®n de las Administraciones p¨²blicas perseguirlo sea quien sea el defraudador y est¨¦ donde est¨¦ su residencia.
Los motivos del se?or Ibarra, como cualquier cat¨¢logo de mandamientos, se resumen en uno: si su comunidad va a recibir menos, la medida ser¨¢ mala (motivo 8). 0 no ha le¨ªdo las propuestas descentralizadoras con la debida atenci¨®n, o pretende despistar al lector desprevenido. Porque es rotundamente falso que, en base a las mismas, en 1990 Extremadura hubiera recibido 3.958 millones, en lugar de los 21.558 que efectivamente recibi¨®.
Las propuestas de participaci¨®n en el IRPF se acompa?an sistem¨¢ticamente de mecanismos de nivelaci¨®n para elevar las disponibilidades de las regiones con menor capacidad fiscal. En sistemas muy igualatorios, como el alem¨¢n, los mecanismos de nivelaci¨®n garantizan que ning¨²n land obtiene recursos incondicionados superiores al 105% o inferiores al 95% de la media federal.
Sin menoscabo alguno de la solidaridad interterritorial, que, dispone en Espa?a del FCI como instrumento, y de las aportaciones de los Fondos Estructurales de la CE. Y, por supuesto, sin perjuicio de la m¨¢s relevante solidaridad interpersonal. Las ampl¨ªsimas diferencias territoriales en la recaudaci¨®n. de impuestos financian las pol¨ªticas estatales de infraestructuras y equipamientos sociales, as¨ª como el sistema de prestaciones sociales.
Lo dem¨¢s son fuegos de artificio (motivos 7-8), porque la, financiaci¨®n local forma parte de otra pel¨ªcula. Porque a trav¨¦s de la gesti¨®n de las comunidades aut¨®nomas debe distribuirse internamente la renta y la riqueza regional. Porque los bancos y empresas continuar¨¢n tributando por el impuesto de sociedades y no por el IRPF. Y porque los empleados de cualquier Administraci¨®n contribuir¨¢n all¨ª donde reciban los servicios p¨²blicos a que tienen derecho como contribuyentes.
El lector desprevenido se pregunta ahora: ?tanto ruido para tan pocas nueces? Pues las nueces no son pocas. La participaci¨®n auton¨®mica en el IRPF introduce cambios.
A) Aumenta la autonom¨ªa tributaria, sobre todo si se habilita el establecimiento de recargos (o descargos) en la participaci¨®n auton¨®mica.
B) Hace m¨¢s transparentes los flujos solidarios interterritoriales. La transparencia es un elemento positivo tanto en econom¨ªa como en pol¨ªtica (sobre todo en pol¨ªtica), puesto que dificulta la proliferaci¨®n de discursos demag¨®gicos, est¨¦riles y separadores.
C) Mejora la percepci¨®n de los ciudadanos sobre cu¨¢nto supone para su bolsillo el gasto de su Gobierno. Como el ciudadano percibe mejor la repercusi¨®n en su econom¨ªa privada de las acciones de su Gobierno aut¨®nomo, se aumenta la eficacia y la responsabilidad del sistema pol¨ªtico auton¨®mico.
D) Aumenta la eficiencia en las haciendas auton¨®micas, m¨¢s vulnerables al rechazo electoral de pol¨ªticas de derroche innecesario y endeudamiento compulsivo (?les suena el problema?).
Modelo alem¨¢n
En conclusi¨®n, la participaci¨®n auton¨®mica en el IRPF es posible en el marco de la LOFCA, aumenta la corresponsabilidad fiscal, no deteriora la solidaridad interterritorial y mejora el funcionamiento del sistema pol¨ªtico auton¨®mico. Pero, por encima de todo, refuerza el Estado de las autonom¨ªas.
En Alemania, paradigma europeo de sistema pol¨ªtico y fiscal descentralizado, la reflexi¨®n para la financiaci¨®n solidaria de la reconstrucci¨®n de los l¨¹nder -orientales est¨¢ en el orden del d¨ªa. En cambio, en Italia, con un sistema regional desprovisto de descentralizaci¨®n fiscal, el enfrentamiento Norte-Sur ha irrumpido con fuerza en el marco pol¨ªtico del pa¨ªs, y acent¨²a la profunda crisis social, pol¨ªtica y econ¨®mica que Italia afronta en estos momentos.
Puestos a elegir, me inclino porque nuestra organizaci¨®n territorial, cuando sea mayor, se parezca a la alemana. M¨¢s antigua, estable y menos veces modificada que el novedoso y provisional "sistema definitivo" espa?ol.
es profesor de Pol¨ªtica Econ¨®mica en la Universidad de Barcelona. Master por la Universidad de Chicago.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.