Israel abandona las negociaciones sobre los refugiados
Israel decidi¨® abandonar ayer las negociaciones multilaterales de paz en Oriente Pr¨®ximo dedicadas al problema de los refugiados que tienen lugar en Ottawa (Canad¨¢). La decisi¨®n de Tel Aviv se debe a la presencia en la delegaci¨®n palestina de Mohamed Hallaj, miembro del Congreso Nacional Palestino, una instituci¨®n que Israel considera pr¨®xima a la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP), de Yasir Arafat.
Hallaj es originario de Cisjordania y dirige un instituto de investigaci¨®n palestino en Washington. El pol¨¦mico representante confirm¨® a Reuter que hab¨ªa participado como miembro de pleno derecho en la ¨²ltima reuni¨®n del Consejo Nacional Palestino, en Argelia en 1991." Hemos venido aqu¨ª sobre la base de un acuerdo seg¨²n el cual la delegaci¨®n palestina ser¨ªa aceptable para nosotros, y este acuerdo no se ha respetado", afirm¨® un miembro de la delegaci¨®n israel¨ª. Esta declaraci¨®n fue criticada por la portavoz palestina, Hanan Ashrawi, quien afirm¨® que los israel¨ªes intentan "decidir de manera unilateral lo que es aceptable y lo que no lo es".
Esta ruptura en el seno de uno de los principales foros de negociaci¨®n creados al amparo del proceso de paz iniciado en Madrid se produce despu¨¦s de un notable alejamiento durante estos ¨²ltimos d¨ªas entre las posiciones de ambas partes y cuando la situaci¨®n sobre el terreno sigue siendo delicada. La tensi¨®n, sin embargo, ha bajado en el norte de Israel despu¨¦s de que Washington pidiera a Siria que contuviese a las milicias de Hezbol¨¢ en el sur de L¨ªbano. Por su parte, el presidente electo de Estados Unidos, Bill Clinton, pidi¨® al primer ministro israel¨ª, Isaac Rabin, que hiciese gala de la mayor prudencia posible.
Durante la noche del martes al mi¨¦rcoles no se produjeron, bombardeos contra territorio israel¨ª desde L¨ªbano, lo que no impidi¨® que Tel Aviv mantuviese su demostraci¨®n de fuerza y que sus aviones bombardearan otra vez anoche objetivos de Hezbol¨¢ en el sur del pa¨ªs vecino.
Los Camiones militares segu¨ªan ayer subiendo refuerzos hacia la llamada zona de seguridad israel¨ª en el sur de L¨ªbano, mientras el viceministro de Defensa, Mota Gur, antiguo jefe del Estado Mayor, advert¨ªa que Israel "no tolerar¨ªa nuevos ataques contra su poblaci¨®n civil", pero matizaba que esta tensi¨®n no afectaba las conversaciones de paz reanudadas el lunes en Washington. El objetivo del militar era ya m¨¢s bien disuasorio: advertir a las milicias de Hezbol¨¢ que se abstuvieran de seguir bombardeando Galilea.
Consejos de prudencia
Ayer, el Gobierno liban¨¦s, aliado estrecho de Siria, pidi¨® a Hezbol¨¢ que dejase de bombardear territorio de Israel y no diera pretextos a Tel Aviv para que invadiese el sur de L¨ªbano. As¨ª se lo pidi¨® el ministro de Defensa liban¨¦s a un alto mando de las citadas milicias proiran¨ªes. Esta intervenci¨®n oficiosa fue aconsejada tambi¨¦n por EE UU, y fue interpretada por los observadores en Beirut como una victoria pol¨ªtica del Gobierno laborista de Tel Aviv, frente a la oposici¨®n de derecha que reclamaba una acci¨®n militar m¨¢s contundente.
Israel ha ense?ado los dientes montando una guerra psicol¨®gica para tratar de contener la degradaci¨®n de la situaci¨®n. Por eso, todas las televisiones internacionales fueron autorizadas a filmar la marcha de las columnas blindadas israel¨ªes cuando hasta ahora todo movimiento de tropas era sometido a censura informativa.
"Todo depende ahora, en definitiva, de los sirios", afirma el diputado laborista y general en la reserva Efra¨ªn Sneh, cercano a Rabin. En su opini¨®n, queda excluida cualquier operaci¨®n militar para extender la zona de seguridad hacia el Norte y tratar de erradicar as¨ª las bases de Hezbol¨¢.
"Nada podr¨ªa impedir despu¨¦s que esas milicias libanesas reagrupasen sus filas m¨¢s lejos de la frontera y bajo la protecci¨®n de los sirios", afirma Sneh. Seg¨²n este diputado, los sirios est¨¢n utilizando a Hezbol¨¢ para presionar a Israel y arrancarle concesiones.
El otro frente de conflicto, los territorios ocupados, tuvo ayer un nuevo rebrote de violencia. Cuatro ciudadanos palestinos resultaron muertos, tres d¨¦ ellos en la franja de Gaza y uno en Cisjordania, cuando protestaban contra la ocupaci¨®n. Los soldados israel¨ªes dispararon sobre los manifestantes concentrados.
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