20-N

Dado que este a?o se cumple el primer centenario del nacimiento de Franco, el 20-N hab¨ªa que celebrarlo por todo lo alto. Como se ha podido comprobar en los escaparates de las. librer¨ªas, las tertulias y las presentaciones, Franco sigue despertando grandes pasiones, incluso para tantos y tantos j¨®venes que no saben qui¨¦n fue y sobre todo qui¨¦n es, todav¨ªa. Para los que tienen a?os suficientes para haber convivido con Franco desde la procelosa condici¨®n de animales l¨®gicos, hay tantos Francos como barrios ideol¨®gicos. Es imposible que Franco sea recordado igualmente por el hijo o nieto de una de sus v¨ªctimas o por el hijo o nieto de una de las v¨ªctimas de los que respondieron al franquismo durante la guerra civil. Despu¨¦s, a partir de 1939, Franco tuvo el monopolio exclusivo del desquite hist¨®rico.. Me sorprende que, tras casi cuarenta a?os de monopolio del franquismo como hegemon¨ªa del esp¨ªritu colectivo, ni siquiera 100 a?os sea tiempo suficiente para admitir la pluralidad de la memoria sobre Franco, la elemental y l¨®gica divisi¨®n entre los que le consideran un liberador y un exterminador. La groseria de esp¨ªritu de los que le consideran un liberador, su taca?ez hist¨®rica, es insultante. Se han permitido d¨¦cadas de apropiaci¨®n de una ¨²nica lectura posible del franquismo y ahora se sublevan ante la "parcialidad" de la memoria antag¨®nica. Y tan peligrosos como ellos son los que piden "objetividad" o, peor a¨²n, "imparcialidad" ante el propietario de la casa el caballo y la pistola, en afortunada met¨¢fora de Le¨®n Felipe.

Pero que nadie se alarme. Franco ser¨¢ una mercanc¨ªa que durar¨¢ hasta las pr¨®ximas Navidades, y en pleno 1993 otras efem¨¦rides se convertir¨¢n en inevitables. S¨®lo lamento que los socialistas hayan olvidado el centena rio de Negr¨ªn. Pero s¨®lo fue un perdedor y adem¨¢s de izquierdas.