Los negros m¨¢s ilustres de Nueva York arroparon el preestreno en Manhattan

Los negros m¨¢s famosos e ilustres de Nueva York, encabezados por el alcalde de la ciudad, David Dinkins, asistieron el lunes al preestreno de la pel¨ªcula Malcolm X en un cine de Manhattan. La modelo Noemi Campbell y la cantante Madonna, acompa?ada de la actriz. Debbie Mazar, fueron algunos de los invitados a la gala a beneficio del United Negro College que no se quisieron perder la primera proyecci¨®n del filme, de casi tres horas y media de duraci¨®n.

El director de la pel¨ªcula que ha popularizado la X, Spike Lee, iba vestido con un esmoquin y, al igual que el actor principal del filme, Denzel Washington, evit¨® cualquier prenda con referencia al popular logo. Sin embargo, entre los invitados s¨ª hab¨ªa fans de las prendas de la X. El cantante Bobby Brown se puso la gorra para ir a juego con la ocasi¨®n en una c¨¦ntrica calle de la ciudad en la que resaltaban las X iluminadas casi tanto como los faros de las limousines.

Si normalmente son las pel¨ªculas las que imponen una determinada moda, en esta ocasi¨®n ha sido la moda la que ha precedido al estreno. Mientras el director Spike Lee mendigaba dinero entre sus amigos negros ricos (la presentadora Oprah Winprey, el humorista Bill Cosby, el deportista Michael Jordan y los cantantes Janet Jackson y Prince) para completar los cinco millones de d¨®lares de coste adicional de producci¨®n de la pel¨ªcula, las ventas de las gorras, camisetas y cazadoras alcanzaban los 100 millones de d¨®lares (unos 10.000 millones de pesetas) de ventas. Si todos los j¨®venes que se visten con la X en los barrios urbanos norteamericanos supieran el significado de la vida de Malcolm X, no har¨ªa falta que la pel¨ªcula se estrene ma?ana en los cines de Norteam¨¦rica.

La moda de la X

La popularidad de la X que representa el logo del l¨ªder negro musulm¨¢n ha sido tan grande como para que se bromee con que por fin alguien va a hacer una pel¨ªcula sobre el inventor del logo. El jugador de baloncesto retirado Magic Johnson es tan s¨®lo uno de los compradores de las gorras que, como si se tratara de una plaga, han sustituido a las viseras de b¨¦isbol tradicionales entre los j¨®venes norteamericanos.

"Es superficial ver a la gente caminando con gorros con la X y saber que nunca van a leer la autobiograf¨ªa de Malcolm. Esta gente no sabe nada de Malcolm y asume que es un, s¨ªmbolo de rabia. Le han dejado desprovisto de toda su complejidad y le ven como una especie de Ice Cube, como un antecesor del rap m¨¢s cargado de rabia", explica el profesor de la Universidad de Harvard Henry Louis Gates.

Sin embargo, aunque Malcolm es hasta ahora un s¨ªmbolo cotidiano y un personaje hist¨®rico poco conocido para los negros de las grandes ciudades, las tres horas y 21 minutos de la pel¨ªcula de Spike Lee van a ampliar sin duda el conocimiento del l¨ªder musulm¨¢n que muri¨® asesinado en Harlem en 1965. La pel¨ªcula, que ha costado 34 millones de d¨®lares, (unos 3.400 millones de pesetas), de los cuales la productora Warner ha puesto 20 millones de d¨®lares, ha estado rodeado de pol¨¦mica y publicidad.

Para engrosar el mito, Lee estuvo protegido en todo momento por miembros de Fruit of Islam, una agrupaci¨®n de defensa de los musulmanes estadounidenses, que se encargaron de que la grabaci¨®n sobre la vida y muerte de su ¨ªdolo transcurriera sin problemas.

Adem¨¢s de ofrecer dinero de los preestrenos a asociaciones de afroamericanos como la Duke Ellington School of Arts de Washington, Spike Lee solicit¨® que las revistas que le quisieran entrevistar enviaran a periodistas negros. Junto con su provocaci¨®n para que los medios de comunicaci¨®n se concienciaran sobre la ausencia de trabajadores de su raza, se anim¨® a los j¨®venes negros norteamericanos a que dejaran de ir a clase para ir a ver su pel¨ªcula.

El director espera que, tal y como ¨¦l empez¨® a interesarse por la guerra civil norteamericana tras asistir de ni?o a la tambi¨¦n largu¨ªsima proyecci¨®n de Lo que el viento se llev¨®, su Malcolm X sirva para que los adolescentes se conciencien de los problemas de su raza. "Si un joven negro quiere pagar tributo a Malcolm X, debe mirarse al espejo, hablar de su educaci¨®n y poner m¨¢s ¨¦nfasis en ella", ha dicho Spike Lee.