El r¨¦gimen cubano acent¨²a su represi¨®n contra la oposici¨®n y silencia a la prensa extranjera
Una oleada de represi¨®n sin precedentes se ha abatido desde hace una semana sobre la disidencia cubana, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas. Dos conocidos opositores han sido detenidos y las casas de otros tres est¨¢n cercadas. Las agencias de prensa extranjeras acreditadas en La Habana no han podido informar de lo sucedido porque el Departamento de Informaci¨®n del Ministerio del Interior les advirti¨® que su integridad no est¨¢ garantizada si dan cuenta de la actividad de la disidencia. El acoso a la oposici¨®n se produce en v¨ªsperas de las elecciones municipales.
Los corresponsales extranjeros fueron convocados el jueves 10 a una reuni¨®n en la que se les se?al¨® que, si siguen asistiendo a ruedas de prensa de miembros de la oposici¨®n "no deber¨¢n sorprenderse si el pueblo indignado los confunde con disidentes y les manifiesta su repulsa". Las autoridades cubanas, a?adieron, no podr¨¢n garantizar su integridad f¨ªsica si siguen manteniendo contactos con elementos contrarrevolucionarios.Coincidiendo con esta reuni¨®n se desat¨® una ola de represi¨®n cuya principal v¨ªctima ha sido Elizardo S¨¢nchez Santa Cruz, el m¨¢s conocido de los defensores de derechos humanos que estaba a¨²n en libertad. Refugiado en casa de una amiga -su domicilio estaba rodeado por una muchedumbre enfurecida- S¨¢nchez sufri¨® una paliza el jueves pasado tras la que la polic¨ªa lo condujo al hospital militar Carlos J. Finlay. Tras recibir algunas curas fue detenido y se ignora su paradero.
Un estrecho colaborador de S¨¢nchez, Rodolfo Gonz¨¢lez, portavoz del Comit¨¦ de Derechos Humanos, fue tambi¨¦n detenido. Desde el fin de semana permanece en Villa Marista, la sede de la Seguridad del Estado.
Las casas de otras tres personalidades de la disidencia est¨¢n tambi¨¦n cercadas desde el jueves 10 por manifestantes castristas que, peri¨®dicamente, llevan a cabo "actos de reafirmaci¨®n revolucionaria". Se trata de los domicilios de Gustavo Arcos, otro activista de los derechos humanos; VIadimir Roca, de ideolog¨ªa socialdem¨®crata; y ?lvaro Prendes, un piloto de la fuerza a¨¦rea, H¨¦roe de Playa Gir¨®n, que se ha unido a la oposici¨®n.
La intensificaci¨®n de la represi¨®n se produce en v¨ªsperas de unos comicios municipales en los que, por primera vez, varios candidatos compiten por un mismo cargo p¨²blico aunque todos ellos cuentan con el aval ideol¨®gico del Partido Comunista. Las embajadas extranjeras en La Habana est¨¢n m¨¢s sorprendidas a¨²n por otra coincidencia. La paliza administrada a Elizardo S¨¢nchez tuvo lugar casi al mismo tiempo que el comandante Fidel Castro recib¨ªa a una delegaci¨®n dem¨®crata de EE UU que viaj¨® a la isla para alentar una apertura. La delegaci¨®n estaba encabezada por Wayne Smith, ex jefe de la secci¨®n de intereses norteamericanos en La Habana.
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