No discuta en Navidad
Estudios en personas y en simios prueban que el estr¨¦s da?a el sistema inmunol¨®gico
La gente con muchos amigos o fuertes lazos familiares suele vivir m¨¢s tiempo que los solitarios. Entre las v¨ªctimas de un ataque al coraz¨®n, quienes gozan de apoyo emocional sobreviven m¨¢s tiempo que los que no lo tienen. En una discusi¨®n conyugal, se resiente m¨¢s el sistema inmunol¨®gico de quien act¨²a con mayor hostilidad. La mente influye sobre el cuerpo de numerosas y sutiles formas, como demuestra una abundante serie de nuevos estudios realizados por cient¨ªficos norteamericanos tanto en simios como en parejas humanas.
"Lo que parece m¨¢s importante para el mantenimiento de la salud son las relaciones m¨¢s cercanas", afirma la doctora Janice Kiecolt-GIaser, psic¨®loga de Ohio, autora de un estudio en el que demuestra c¨®mo las disputas matrimoniales pueden debilitar el sistema inmunol¨®gico de las parejas. Ella y otros investigadores tratan de descubrir c¨®mo el cuerpo convierte en una ventaja biol¨®gica, que mejora la salud, los estados de ¨¢nimo que se derivan de tener relaciones cercanas. Los datos disponibles hasta ahora indican la existencia de mecanismos psicol¨®gicos en el funcionamiento del sistema inmunol¨®gico y cardiovascular."?Qu¨¦ sucede en una red social para que influya de tal modo en la salud?", se pregunta Sheldon Cohen, psic¨®logo de la Universidad Carnegie Mellon. Para hallar las respuestas, Cohen uni¨® sus fuerzas a las del doctor Jay Kaplan, psquiatra de la Facultad de Medicina de Browman Gray, Carolina del Norte, dedicado al estudio del estr¨¦s en los macacos.
En su estudio, 40 macacos machos eran asignados al azar a grupos estables o cambiantes; en la jaula de estos ¨²ltimos se introduc¨ªan tres o cuatro monos nuevos cada mes. Para los macacos, el unirse a un nuevo grupo de simios es una experiencia sumamente estresante: los machos se amenazan entre s¨ª hasta que se establece una jerarqu¨ªa dominante.
Lucha por el predominio
Sin embargo, incluso bajo la dureza de la lucha por el predominio, algunos monos segu¨ªan siendo amistosos. "Esos monos tocaban m¨¢s a otros monos, acicalaban a sus compafieros de jaula, o simplemente se sentaban cerca de ellos", afirma Cohen. "En los monos, todo esto son signos de afiliaci¨®n".Despu¨¦s de 26 meses de permanencia en grupos cambiantes y de luchas por el predominio, se hall¨® que los monos m¨¢s amistosos ten¨ªan respuestas inmunol¨®gicas m¨¢s fuertes, en tanto que los m¨¢s agresivos las ten¨ªan m¨¢s d¨¦biles. Los resulta(los de Cohen, publicados en la revista Psychological Science, sugieren que "la afiliaci¨®n protege a los animales de la influencia potencialmente pat¨®gena del estr¨¦s cr¨®nico".
Si una intimidad amistosa protege el sistema inmunol¨®gico, consid¨¦rese lo que ocurre con un conflicto. "El modo en que las parejas tratan sus desacuerdos parece afectar a. sus sistemas inmunol¨®gicos", afirma la doctora Kiecolt-Glaser. Esta doctora y su marido, el inmun¨®logo Ronald Glaser,de la Universidad de Ohio, realizaron un estudio sobre 90 pareJas, a las que se les pidi¨® que resolvieran un motivo de desacuerdo. An¨¢lisis de sangre continuos durante 24 horas permitieron medir sus respuestas ininunol¨®gicas durante y despu¨¦s de la discusi¨®n.
"Aquellas parejas que mostraron mayor hostilidad y negatividad durante las discusiones tuvieron una ca¨ªda de ocho unidades inmunol¨®gicas durante las siguientes 24 horas. Cuanto m¨¢s hostil es uno durante un conflicto matrimonial, tanto m¨¢s duramente se ve afectado su sistema inmunol¨®gico", observa Klecolt-Glaser.
Enfermedades de coraz¨®n
Si algunos investigadores han explorado los efectos de las relaciones en el sistema inmunol¨®gico, otros se han centrado en el sistema cardiovascular. Las cosas son parecidas, empezando por los monos: los macacos menos amistosos tienen un mayor riesgo de enfermedades del coraz¨®n.Utilizandw los mismos monos en las mismas situaciones de estr¨¦s estudiadas por Cohen, Stephen Manuck, psic¨®logo de la Universidad de Pittsburgh, descubri¨® que los m¨¢s propensos al antagonismo hacia sus compa?eros de jaula desarrollaban el doble de obstrucciones arteriales que sus compa?eros m¨¢s pac¨ªficos.
""Las interacciones negativas", afirma el doctor Timothy Smith, psic¨®logo de la Universidad de Utah, "especialmente si intervienen en ellas la ira o las luchas por el predominio, tienen un efecto a corto plazo en el sistema cardiovascular. Si este efecto se repite de forma regular durante varios a?os, puede provocar enfermedades en el coraz¨®n. Sin embargo, si esas relaciones son una fuente de satisfacci¨®n, pueden ejercer un efecto protector sobre ¨¦l".
En un estudio realizado sobre 194 hombres y mujeres de edad avanzada que hab¨ªan sufrido ataques de coraz¨®n, se descubri¨® que aquellos que ten¨ªan dos o m¨¢s fuentes de apoyo emocional ten¨ªan el doble de probabilidades de sobrevivir m¨¢s de un a?o despu¨¦s del ataque que los que no las ten¨ªan.
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