Kohl realiza una t¨ªmida remodelaci¨®n del Gobierno y s¨®lo cambia a cuatro ministros

El canciller alem¨¢n, Helmut Kohl, anunci¨® ayer la esperada remodelaci¨®n del Gabinete que afect¨®, finalmente, a tan s¨®lo cuatro carteras, incluida la de Econom¨ªa, donde se limit¨® a confirmar al candidato ya elegido por sus socios del Partido Liberal (FDP). La ausencia total de sorpresas pone en evidencia la escas¨ªsima capacidad de maniobra con que el canciller se mueve en el seno de la coalici¨®n, as¨ª como la falta de personalidades en su partido.

Adem¨¢s de confirmar a G¨¹nter Rexrodt (FDP) en Econom¨ªa, elegido hace ya 10 d¨ªas por sus socios liberales para sustituir J¨¹rgen M?llemann, que dimiti¨® tras verse involucrado en un caso de nepotismo, el canciller se limit¨® ayer realizar unas pocas modificaciones. Los cambios pasan por ocupar el puesto dejado vacante desde hace m¨¢s de un mes en el Ministerio de Correos y Telecomunicaciones por el democristiano (CDU) Christian Schwartz-Schilling ; a sustituir en Agricultura al socialcristiano b¨¢varo (CSU) Ignatz Kiechle, que ya hab¨ªa pedido hace tiempo su relevo, y a acabar con la carrera del ministro de Investigaci¨®n y Tecnolog¨ªa, Heinz Reisenhuber (CDU), cuya cabeza hab¨ªan pedido los liberales que pretend¨ªan, adem¨¢s, incorporar este departamento al Ministerio de Econom¨ªa. El diputado Jochen Borchert (CDU) es el nuevo ministro de Agricultura; Wolfgang B?tsch, jefe del grupo parlamentario de los socialcristianos b¨¢varos, ocupa la cartera de Correos y Telecomunicaciones; y Matthias Wissmann (CDU), hasta ahora portavoz de Econom¨ªa de. la CDU, pasa a ocupar el M¨ªnisterio de Investigaci¨®n y Tecnolog¨ªa. Kohl redujo tambi¨¦n el n¨²mero de vicesecretarios en el Gabinete, que pasa de 33 a 26, en lo que pretende ser una se?al de que el Gobierno se toma en serio la reducci¨®n del gasto.

Ecuador de la legislatura

Tras este alarde de timidez es evidente que el empuj¨®n que esta anunciada remodelaci¨®n, que coincide con el ecuador de la legislatura, deb¨ªa darle a Gobierno se ha quedado en nada. Sucede, sin embargo, que en los dos a?os transcurridos desde que la coalici¨®n gubernamental ganara arrolladoramente las elecciones, el baile de ministros ha sido constante. Sin contar los cambios de ayer, nada menos que cuatro ministros, tres de los cuales de gran peso pol¨ªtico, han abandonado el Gobierno, provocando, a su vez, cambios en seis ministerios.En Exteriores, el m¨ªtico Hans Dietrich-Genscher (FDP), fue sustituido por Klaus Kinkel (FDP), cuyo puesto en Justicia fue ocupado por Sabine Leutheuser-Schnarremberger (FDP). En Defensa, Gerhard Stoltemberg (CDU) dej¨® su puesto a V¨®lker Ruhe, del mismo partido. Wolfgang Sch?uble (CDU) abandon¨® el Gabinete para pasar a ser jefe del grupo parlamentario de la mayor¨ªa, dejando Interior a Rudolf Seiters, del mismo partido, cuyo puesto en el ministerio de Canciller¨ªa fue ocupado por Friedrich Bohl, tambi¨¦n democristiano. Por ¨²ltimo, en Sanidad, Gerda Hasselfeldt (CSU), involucrada en un caso de espionaje de sus subordinados fue sustituida por Horst Seehofer, tambi¨¦n de los socialcristianos b¨¢varos.

La reuni¨®n de los partidos que forman la coalici¨®n (CDU, CSU y FDP) sirvi¨® tambi¨¦n para dar a luz a la propuesta definitiva del llamado "pacto de solidaridad" para financiar la reconstrucci¨®n de la antigua Alemania comunista. Kohl no est¨¢ dispuesto a una nueva subida de impuestos, que tan cara le cost¨® en 1991. Por ello aplaza hasta 1995, despu¨¦s de las elecciones, el restablecimiento del paquete impositivo. A cambio, seg¨²n este proyecto del Gobierno, se prev¨¦ un endeudamiento de 53.000 millones de marcos, y a partir de 1994 se establecer¨¢ una tasa por el uso de las carreteras y autopistas.

Pero donde mayores dificultades encontrar¨¢ el plan del Gobierno es en su pretensi¨®n de reducir las ayudas sociales. Concretamente en la anunciada reducci¨®n del seguro de paro y de la ayuda a los parados de larga duraci¨®n, as¨ª como en los pagos que el Gobierno hace a las familias en concepto de hijos.

El Partido Socialdem¨®crata hizo saber inmediatamente su oposici¨®n a estos planes. Su l¨ªder, Bj?rn Engholm acus¨® al Gobierno de no, estar realmente interesado en trabajar conjuntamente con la oposici¨®n.