Vestidos para morir

El color del conde Dr¨¢cula es el rojo, el de sus novias es el blanco y el de su amada Elisabeta es el verde. La dise?adora japonesa Eiko Ishioka ide¨® el vestuario de los personajes de la pel¨ªcula El Dr¨¢cula de Bram Stoker, de Francis Ford Coppola, inspirada en cuadros de Gustav Klimt, el arte bizantino, las armaduras samur¨¢is y las exuberantes chicas de las historietas. Desde el martes y hasta hoy -de cinco de la tarde a tres de la madrugada- se exponen en la sala Rev¨®lver Club (Galileo, 26) 11 de esos vestidos y una veintena de objetos relacionados con la pel¨ªcula.

Los trajes, valorados seg¨²n la organizaci¨®n en unos diez millones, de pesetas, llegaron el mismo martes desde Tokio y ma?ana se ir¨¢n a Oslo (Noruega) para, despu¨¦s de recorrer la mayor¨ªa de las capitales europeas, acabar encerrados en las vitrinas que el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA) dedica a las piezas ¨²nicas de la moda y el dise?o. En Madrid se han instalado en la discoteca Rev¨®lver Club, donde el martes, a la una de la madrugada, mientras se escuchaba el rock de los grupos Freaki Fuckin Weirdoz, Heads Up, FFF, Scat Opera y Mano Negra, apenas hab¨ªa 50 personas."Son incre¨ªbles", comenta Mayka, una modelo de 25 a?os, que despu¨¦s de ver la pel¨ªcula se acerc¨® a la sala. "Pero la colocaci¨®n es horrible y la luz espantosa" contin¨²a, cuando he entrado pensaba que eran falsos y que esto era un montaje. S¨®lo ves que son de verdad al acercarte y observar de cerca las telas y los bordados. Si estuvieran en una galer¨ªa, colocados como es debido, parecer¨ªan lo que realmente son, obras de arte", a?ade la bella modelo, que devor¨® las seductoras transparencias de los vestidos de las tres novias de Dr¨¢cula.

Dr¨¢cula, en las pasarelas

La moda de Dr¨¢cula est¨¢ fuera y dentro de la pantalla. Los dise?adores italianos Giorgio Armani, Dolce & Gabbana y Valentino han incluido en sus ¨²ltimas colecciones, presentadas esta misma semana en Mil¨¢n, modelos inspirados en el hombre vampiro: pelo largo, gafas peque?as y redondas, sombreros de copa, levitas y anillos de gran tama?o. Suzy Menkes escrib¨ªa el pasado martes en la secci¨®n de moda del International Herald Tribune: "Capas negras y rojo color sangre; ?es una pel¨ªcula o una fiesta de disfraces? No, es la nueva moda de los hombres italianos que se han vuelto locos con Dr¨¢cula".Eiko Ishioka, la dise?adora del vestuario, trabaj¨® con Coppola en la adaptaci¨®n para televisi¨®n que el director hizo del cuento. de Washington Irving Rip Wan Winkle y en la pel¨ªcula de Paul Schrader Mishima, que produjo Coppola para sus desaparecidos estudios Zoetrope. La dise?adora ha declarado que para sus creaciones se ha inspirado en los iconos bizantinos, en la peluquer¨ªa Kabuki, en los clamidosaurios australianos y en el expresionismo alem¨¢n.

Para Jorge, de 27 a?os, la pena es que entre los objetos que tambi¨¦n han llegado a Madrid -entre los que hay crucifijos, libros, cartas lacradas y pu?ales- no est¨¦ el anillo con cabeza de drag¨®n del conde. "Es lo que m¨¢s me ha gustado de todo el decorado", dice Jorge, que lo ¨²nico que no lleva de cuero es una bufanda blanca. A?ade: "Creo que los trajes son m¨¢s espectaculares al natural. Sobre todo me gusta el de guerrero, me encanta que parezca de pl¨¢stico".

A la ciudad han llegado, entre otros, los dos trajes de guerrero de Dr¨¢cula: uno rojo, y otro negro y morado con un casco en forma de pico de ave. Los transparentes vestidos de las tres novias del conde; el vestido de novia de Lucy (la joven arist¨®crata inglesa vampirizada), y del que no han desaparecido tres peque?as gotas de sangre; dos castos vestidos verdes de la amada del conde, Elisabeta, y el traje bordado en pedrer¨ªa e hilo dorado con el que muere Dr¨¢cula atravesado por un pu?al con empu?adura de rinoceronte. Este enorme pu?al tambi¨¦n viaja con el vestido y se muestra en la vitrina donde est¨¢n los objetos sueltos.